Si el rescate del Lago de Atitlán depende de la administración pública en general -y de la administración de Los Colom en particular, o de Rafael Espadita Espada– mi respuesta a si está irremediablemente condenado es que sí.
Vea usted lo que pasa con un asunto tan grave como el del lago, y tan previsible: la entidad encargada de vigilar los incendios forestales está inactiva y ningún órgano del estado sabe si hay siniestros, ni cuántos focos de calor se han detectado. El Sistema Nacional de Prevención y Control de Incendios Forestales expresó que Simplemente no hay datos; no se sabe si hay incendios activos. Ni siquiera está nombrado el director de la entidad.
¿Por qué iba a ser diferente el caso de Atitlán al de los incendios forestales? La solución, pues, debe ser buscada por vías novedosas; no por las de siempre…cuyos resultados ya conocemos.
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This entry was posted on miércoles, enero 6th, 2010 at 1:08 pm and is filed under Ambiente, Lago de Atitlán, Los Colom, Rafael Espada.
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Luis, como siempre interesantes sus comentarios, ahora bien; seguramente será como usted responde a su pregunta, no habrá diferencia; pero la puede haber si las personas que viven en los alrededores del lago en los tan famosos municipios y zonas de influencia se interesan realmente en salvar lo que pareciera es su, o una al menos, fuente de ingresos; sin esperar que el gobierno intervenga. Yo creo que la costrumbre de esperar a que el gobierno intervenga está muy arraigada y por eso estas personas seguirán esperando la intervención gubernamental, sediendo así parte de su libertad de decidir y actuar.Guillermo Galindo