“Los gobiernos de corte fascista o socialista, a su modo o solapadamente, son los que se sienten vulnerados por la libertad de prensa. De ahí que siempre buscan pretextos para coartarla, porque es el único poder efectivo para desenmascarar los actos de corrupción. Que no nos extrañe que lo que se pretenda es quitarle al ciudadano común y corriente el derecho de percatarse de todo lo que ocurre a su alrededor, para que no tenga capacidad de condenar moralmente, con su merecido desprecio, a tanto sinvergüenza que sólo persigue medrar a costa de nuestros impuestos, y de ahí que no se conforme con aumentar los gravámenes para decretar presupuestos que no concuerdan con la realidad socio económica de nuestro país.” Esta fue la atinada opinión de Luis Alfredo Aragón, publicada hoy en Siglo Veintiuno.