La hipocresía de los europeos en cuanto a temas como racismo y exclusión nunca deja de sorprender; y en el caso de España, esa hipocresía es doblemente ominosa.
El Ministerio de Relaciones Exteriores, de Guatemala, reportó más casos de chapines que no han sido autorizados para entrar en España y Francia; la medida se ha generalizado hacia indígenas y pobres.
“¡Vaya con los europeos!”, dijo Cándido, al comentar que “aquí vienen con sus prédicas y sus presiones contra la exclusión y el racismo; pero ellos no quieren inditos, ni pobres en sus países”. Cándido añadió que, “además, en el caso de España la doble moral contra los inmigrantes tiene doble carácter de abominable. América Latina recibió con los brazos abiertos a sus comunistas y socialistas cuando huyeron del fascismo; y en países como Alemania, los españoles recibían el mismo trato miserable que ellos les dan ahora a llos que llaman sudacas. Vea usted que malagradecidos y que gurruminos son los gachupines”.