El presidente electo, Álvaro Colom, analiza opciones para lidiar con el alza del precio internacional de los combustibles. Una de ellas es eliminar los impuestos que los gravan. Aparte del 12% de impuesto al valor agregado, sobre los combustibles pesa un tributo a la distribución de petróleo y sus derivados que, en el caso de la gasolina súper es de $0.61 y en el diesel es de $0.16
Esta magnífica idea ayudaría sustancialmente a la economía de los guatemaltecos. Algunos temen por el efecto que esto tendrá en los ingresos de la administración; pero, claro, la medida debe ir acompañada de una revisión sustancial de los gastos, para la eliminación de aquellos que son innecesarios, o constituyen desperdicio de recursos.
Anda en el ambiente la propuesta de que la administración chapina acepte la iniciativa chavista de Pro Caribe, que permitiría la compra de petróleo barato. Sin embargo, “caer muerto” con el dictador venezolano es “venderle el alma al diablo”. Lo mejor es sanear el presupuesto del estado y liberar a los guatemaltecos de la esclavitud de los impuestos.
Luis, decir que el petróleo venezolano es barato es muy peligroso. Chávez, a través de su iniciativa de PetroCaribe está ofreciendo petróleo y derivados A PRECIOS DE MERCADO. La diferencia es la forma de pago – la mitad ahora y la otra mitad en 20 años. Imagínate la cantidad de deuda externa que eso va a generar para los países, como Jamaica, que se han metido en el paquete, de cabeza y con todo botas, además de la cantidad de votos que Chávez se ha asegurado en la OEA y la ONU.La gente que habla de PetroCaribe no piensa en sus hijos o no sabe cuál es el plan. Saludos!