Según Alvaro Santa Clos Colom no hay impedimento alguno para que Sandra Evita Torres sea candidata presidencial. Según el Presidente, a su esposa le tienen miedo y en caso de no permitírsele la incripción se le estaría violando el derecho humano a ser electo.
Lo cierto, sin embargo, es que el artículo 186 (c) de la Constitución les prohibe a los parientes del Mandatario, dentro del cuarto grado de consangunidad y segundo de afinidad, que opten al cargo de Presidente. Y si se los prohíbe hasta el cuarto de consangunidad y segundo de afinidad, ¿cómo no le va a estar prohibido a la persona que está tan al mismo nivel que no forma grado?
Aparte de eso, si el razonamiento de Santa Clos tuviera pies y cabeza, a los menores de 40 años también se les estaría violando su derecho a ser electos porque esa es la edad mínima establecida en la Carta Magna; y a los niños de 17 o menos años de edad también se les estaría violando su derecho porque sólo los mayores de 18 pueden elegir y ser electos. A los presos, que pierden sus derechos políticos, también se les estarían violando estos.
Por cierto que los derechos a elegir y ser electos no son de la misma naturaleza de los derechos a la vida, la libertad, la propiedad y la búsqueda de la felicidad. Estos primeros se derivan de la condición humana en el sentido de que les garantizan a las personas su existencia qua seres humanos; en tanto que los segundos son de orden político y se derivan de decisiones políticas.
La retórica de Santa Clos es engañosa y los incautos podrían caer en su trampa. El Presidente, por otra parte, está apoyando expresamente y con propaganda a su esposa. Anoche, en la televisión, vi un anuncio de una visita de Evita algún lado y en el spot, pagado por la Presidencia, una ordadora pedía que la esposa de el Presidente fuera candidata presidencial. Más pelados, no se puede.
Hola Rodolfo. Gracias por escribir. No publiqué su opinión porque un requisito de este espacio es que quienes participen se identifiquen. Porfa, ¿la podría volver a poner e identificarse? Muy agradecido.