Alejandro Sanz no sólo es un músico extraordinario; sino que es un sujeto interesante. Su actitud contra el poder abusivo es ejemplar y contrasta con la de otros músicos, actores y actrices que alcahuetean a gobernantes abusivos y a dictadores.
Luego de su visita a Venezuela, el cantautor dijo: No se puede gobernar desde el miedo y la amenaza, y de eso he visto mucho en Venezuela. Lo digo para los moderados de cualquier signo político.
¿Será que Sanz entiende, también, el papel cómplice y pusilánime que juegan los moderados cuando se trata de defender la libertad y de luchar contra el ejercicio abusivo del poder?