Luisfi en el Mundial de fútbol

¡Ta bien, ta bien! En la mañana iba por Sudáfrica porque uno de mis sobrinos me pidió que lo apoyara con eso; y en el juego de ahorita voy por Uruguay…porque tenía que ir por alguien. ¿Tenía?

En realidad no soy deportivo, y cuando elijo equipos -digamos que para el Mundial de fútbol, o para la Serie Mundial de béisbol- lo hago para tener de qué hablar durante las correspondientes temporadas y por entretenerme con algo; y normalmente hago mi elección de forma muy irracional y sin información contextual alguna. Ahora he elegido a Italia para la final, pues porque otro de mis sobrinos le va a la squadra azzurra y para llevarle la contra al resto de mi familia que, en su mayoría le va a Brasil.
Lo que sí disfruto, y mucho, es cuando tengo la oportunidad de ver uno de estos partidos en buena compañía. Con pizza y cerveza, entre amigos y entre otros seres queridos, creo que hasta aguanto un torneo de golf, o uno de ajedrez.
Mi relación con el fútbol nunca ha sido muy íntima. Cuando tenía como 9 años, un tío me llevó al Estadio Mateo Flores, y ahí estábamos en el balcón donde yo me ocupé más de comer las moras que venían en la hielera que nos habían preparado en casa, que de entender lo que estaba pasando. Más tarde, cerca de los 12 años el profesor de Educación Física, en el colegio, intentó -muy en vano- convertirme en un Defensa aceptable. En su descargo debo decir que me tenía paciencia, mucha más que mis compañeros de equipo, a quienes sin duda perjudicaba mucho. Y en la universidad, una vez aguanté jugar un partido en el Ingenio Concepción; y ahí, con el calor húmedo de la costa, me convencí de que era mejor ver los juegos (con pizza y cerveza) que correr detrás de la pelota.
Aquí estoy, pues, animado con el Mundial (siempre que haya pizza y cerveza). Y si tuviera con qué, aquí va por quienes apostaría:
Sudáfrica, Argentina, Estados Unidos, Alemania, Holanda, Portugal, Chile, Uruguay, Grecia, Eslovenia, Serbia, Japón, Nueva Zelanda, Brasil, España, e Italia.

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5 comments

  1. A mí me llama la atención el fenómeno del '¿Qué nos lleva a escojer un equipo?'. Siempre he pensado que si uno no es del país de donde es el equipo no tiene tanto sentido "escojerlo", no digamos cuando es con respecto a los clubes, ya que, no puede ser por los jugadores, estos cambian a cada rato e incluso al equipo contrario. La única razón que pienso que queda entonces es por los colores del uniforme. ¿Qué clase de identificación profunda existirá en las personas para llegar al punto de decir 'ganamos!'? El equipo ganó, ellos no. Siempre he pensado que es como si hubiera un concierto de mi grupo de rock favorito y yo dijera 'tocamos!'… La verdad personalmente nunca me he identificado ni con el fut ni con ningún otro deporte, en el sentido de verlo y seguir a los equipos, ni es algo que entienda, no digamos el hecho de que si nunca veo fut tampoco creo que tenga sentido ver el mundial… Bueno esa es mi forma de pensar.Ahora lo de la pizza y chela suena muy bien!!!

  2. Mayra Ramírez

    Mi forma de elegir a mis favoritos es todavía más irracional (o quizá no tanto), le voy por el equipo que tienen jugadores más guapos y bien proporcionados (cosa nada dificil, pues todos están bien cuidaditos).Con esto me aseguro que tendré buena diversión en los juegos, veré a los bien dotados jugadores por la mayor cantidad de tiempo… je,je.Así que yo le voy a Italia y mientras disfruto de otros tantos, como los franceses de hoy 🙂

  3. jaja esa reseña historica de tus vivencias con el futbol parece un vivo retrato de las mias. Ve pues no aparece mexico en tu lista, porque sera? jaja

  4. Cabal: Aramos, le dijo la mosca al buey. Je je.

  5. Hola! Agradezco tu soporte "emocional" a mi país, Uruguay…que llegará a dondesea.com. Estoy de acuerdo con Mayra en que el fútbol permite ejercicio visual a las que admiramos la belleza masculina…y como el estar a dieta no impide leer el menú, todas observamos:D Un abrazo, feliz mundial, Andrea.