La instrucción (que no la educación), en Guatemala, es obligatoria, centralizada y monopólica. Aún cuando existen establecimientos privados, sus programas y hasta detalles administrativos, tienen que ser aprobados por el Ministerio de Educación. Los burócratas de ese sector de la administración pública son un grupo de interés que se sirve del presupuesto del estado, cuando no son -descaradamente- buscadores de rentas parasitarias.
…y he aquí
el resultado: La calidad de la instrucción en el país se ubica en el puesto 125 de 133. Esto es, debajo de Nicaragua, Panamá, El Salvador, Honduras y Costa Rica.
En estos países mencionados, seguramente la educación no es menos centralizada, monopólica y politizada que en Guatemala, de modo que aquí, debe haber algo mucho, pero mucho más podrido y desde hace mucho, pero mucho tiempo.
¿Desde cuándo? ¿Desde 1944, o desde 1954? ¿Desde las administraciones de Cerezo, Serrano, De León, Arzú, Portillo, Berger? ¿Qué están haciendo Los Colom para acabar con la podredumbre?
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This entry was posted on viernes, marzo 26th, 2010 at 9:53 pm and is filed under educación, Ministerio de Educación.
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Por eso yo asumí la responabilidad de mi educación y de la de mis hijos.Y cuando me paro en un aula frente a los alumnos, los reto a pensar porque se que es lo mejor para ellos aunque ellos no lo sepan, ni estén acostumbrados a pensar.