La realidad es más extraña que la ficción. ¿Recuerda la película The Terminal, en la que un personaje queda varado en un aeropuerto de Nueva York? Pues…esas cosas pasan en la dura realidad.
José Angel Roque, un cubano disidente lleva 6 semanas en un aeropuerto de Costa Rica, luego de haber huído de la cincuentenaria dictadura de los hermanos Castro.
Su historia no es muy diferente a lade otros cubanos que no aprecian a La Revolución. Participó en grupos clandestinos, fue perseguido, fue apresado y fue vigilado hasta que decidió escapar de la isla.
Roque vive en el aeropuerto desde el 4 de diciembre, cuando quiso pasar por salvadoreño con el pasaporte que un amigo suyo le consiguió a cambio de 1.000 dólares. El primer día estuvo cerca de ser deportado; pero un familiar interpuso un recurso legal ante el Tribunal Constitucional, que les prohibió a las autoridades la deportación. Desde entonces duerme sobre seis sillas y se alimenta con comida de avión, ya que está bajo custodia de la aerolínea Taca, con la que viajó desde La Habana.
