Jack Irving Cohen, uno de los patrocinadores de la administración de Los Colom, consiguió una concesión por 50 años para explotar el caudal de tres ríos, en Quetzaltenango y Retalhuleu, y para construir una hidroeléctrica privada de 35 megavatios.
Está por verse si el financista de Alvaro San Nicolás Colom y de Sandra Evita Torres va a enfrentar los problemas que enfrentan otros que quieren producir energía hidroeléctrica. A ver si los dirigentes populares y los grupos de ecohistéricos que se oponen a las hidroeléctricas van a enfrentarse a los planes Cohen -el amigo del régimen- como se enfrentan a otros empresarios.
Será como aquel dictador que decía: Para mis amigos, lo que quieran; y para mis enemigos: la ley; sólo que aquí se lee como Para mis patrocinadores, lo que quieran; y para los que no me pelan: la dirigencia popular.
Vamos a ver cómo le resuelve ese asunto a su mecenas, Los Colom.