Ya viene enero y los lectores que son padres de familia van a comprar los útiles del colegio de sus hijos. ¿Comprarías a Q1.40 lapiceros que en el mercado podrías comprar a Q0.80? Apuesto a que no. ¿Por qué? Porque cuidarías tu dinero; porque sabes lo que cuesta ganarlo y porque tu prespuesto no está para ser desperdiciado, sino para ser optimizado al máximo.
Porque sabiendo que si tu prespuesto no alcanza no puedes salir a robar.
Pero eso no pasa en la administración pública. El Ministerio de Educación, mediante aquella práctica, compró Q4 millones en lapiceros, al precio de Q6 millones. ¿Por qué? Porque se gastan tu pisto; porque no les cuesta ganarlo, porque el presupuesto está para ser desperdiciado, saqueado y maladministrado en beneficio de intereses específicos…y porque si el presupuesto no les alcanza tienen el poder de la legislación y la fuerza necesarias para salir y obligarte a entregarles más de tu sueldo.
Esta historia se parece a las de las mochilas sobrevaloradas que luego de desintegraron a los pocos días de uso. Ahora imaginate: estos son dos artículos en un sólo ministerio. ¿Cómo será en todos los artículos y servicios que compran todos los ministerios y otras oficinas estatales? ¡Que cochada ha de se eso!…y con tu pisto.
Así, con razón es que a los pipoldermos no les alcanzan los impuestos que te quitan. Con razón la CICIG, las embajadas amigas y el ICEFI quieren que pagues más impuestos, a aquel ritmo de desperdicio y de mala administación…y de latrocinio, no hay plata que aguante.
La ilustración dice: Es una nueva idea: los saqueas sólo un poco de forma regular-se llama impuestos. La tomé de Facebook.
Todos los que piden más impuestos viven o quieren vivir del trabajo de otros, no son productivos. Por eso no se dan cuenta que no es un problema de ingresos, es un problema de malgasto y despilfarro