Con un artículo titulado Testamento Noncuptativo de doña Teodora Guerra y Machuca: Año de 1849, por Consuelo de Zeceña, con quien colaboró mi sobrino Luis Andrés -otro artículo sobre la familia y sirvientes de Juan Maldonado de Paz, por mi cuata Coralia de Rodríguez; uno más sobre el obispo José Salvador Córdova por mi cuate Edgar Pérez; y uno sobre el general Lázaro Chacón (abuelo de amigos queridos), por Guillermo Castañeda; entre otros- fue publicado el número 12 de la Revista de la Academia de Estudios Genealógicos, Heráldicos e Históricos, de Guatemala.
La revista también incluye un homenaje al recordado y estimado Ramiro Ordóñez Jonama, que fue presidente de la Academia en varias ocasiones.
Como dice la autora del artículo sobre el testamento de la señora Guerra y Machuca, este es un documento curioso y pintoresco y un testamento nuncupativo es aquel que es abierto, que se otorga de palabra, o por minuta y ha de leerse ante notario y testigos, o sólo ante testigos y se protocoliza como escritura pública.
Comparto algunos párrafos para animar a los lectores de Carpe Diem a comprar la revista y a leer los estudios valiosos que contiene.
Doña Teodora era natural y vecina de la Antigua, de estado honesto e hija legítima. Les encargó a sus albaceas que hicieran su entierro con la decencia correspondiente a sus facultades.
- A tres sobrinos les dejó mil pesos, a cada uno, con la condición de que le mandaran a hacer un novenario de misas rezadas, cada uno.
- A su hermana (también de estado honesto) le dejó 300 pesos con la condición de que le mandara a decir tres misas.
- A una ahijada le dejó cien pesos…con la condición de que le mandara a decir una misa rezada.
- El producto de la venta de sus casas lo dejó para pagar los gastos de festividades religiosas…y misas.
La manía de las misas es evidente; pero el testamento tiene otros detalles encantadores. Doña Teodora escondía tesoros en su casa, debido a los trastornos políticos:
- En el tabanco de la trastienda dejó dos cajitas; una con 3,500 pesos y otra con alhajas (no te cuento qué alhajas, para que leas el artículo) y cubiertería y candeleros de plata.
- En el cuarto donde se muele el chocolate, en el lugar donde ponen las molenderas las piedras, enterró tres botijuchitas con 3,900 pesos.
- En el cuarto de la trastienda donde había dos armarios -entre la pared y el armarito- dejó 1,500 pesos.
- Debajo de la tarima del escaparate de unas imágenes religioisas dejó 1,500 psesos en oro, cosidos en un paño.
La genealogía y la heráldica son ciencias auxiliares de la historia y como explicó Ludwig von Mises, la historia estudia la acción humana. ¿Qué puede ser más fascinante?
Actualización: Si te interesa un ejemplar puedes obtenerlo en la 6a. avenida 11-43, zona 1, Edificio Pan Am, Oficina 703. La secretaria atiende de 8:30 a 11:30 a.m. de lunes a viernes; o al teléfono 5751 0691. El precio del ejemplar es de Q 150.00.
Estimado Luis: Los Miembros de la Academia Guatemalteca de Estudios Genealógicos, Heráldicos e Históricos, agradecemos mucho el artículo sobre la presentación de nuestra revista doce en la Embajada de México. Si alguien quiere obtenerla, que nos haga favor de llamar al 57510691, para ponernos de acuerdo en cuanto a la entrega. Mil gracias. Luis Maldonado de la Cerda.
Gracias Luis, espero encontrar todavía un ejemplar.
Saludos