No dejo de atorarme de la risa luego de leer que unos 5,000 panetoni de Navidad hechos con harina de coca serán comercializados en Bolivia por una empresa administrada por los propios sindicatos de productores de coca, patrocinados por la administración de Evo Morales.
El proyecto es un esfuerzo por desestigmatizar las hojas de coca, ineludiblemente vinculadas a la cocaína; pero que, en forma de harina inocente, nada tiene que ver con esta droga.
En casa de mis padres, y en las casas de mis abuelas no se comían ni panetone, ni pandoro; y yo conocí esas delicias cuando ya era un niño mayor en casas de amigos de mis padres. Ahora me fascinan, especialmente con helado de vainilla; pero tambien acompañados por buen café con leche. En casa no los consumimos durante la cena de Navidad; pero sí durante la temporada. ¡Como me gustaría probar estos de Bolivia!