¡Bueno!, ya es tiempo de que la administración socialdemócrata chapina se ocupe de lo que importa: Seguridad y justicia. Ya es tiempo de que deje de destinar recursos escasos para satisfacer las demandas de los grupos de interés.
Si los actos como los de hoy no son enfrentados con autoridad y con la ley en la mano; si sigue creciendo la incapacidad administrativa para garantizar seguridad y justicia, ¿sáben qué va a pasar? Que dentro de unos 30 años, algún gobierno de pocas luces va a firmar los acuerdos de paz firme y duradera con dos mareros y dos narcos. Dichos acuerdos van a definir las políticas económica y educativa del país, por ejemplo. Los para entonces exmareros y exnarcos van a tener seguridad pagada por los tributarios. Sus colaboradores y simpatizantes van a ocupar cargos importantes en la administración pública. Las fotos de mareros y de narcos mártires van a ornar al Palacio Nacional; y más de uno va a ser condecorado. Otro gobierno de sinvergüenzas va a pedirles perdón a los mareros y narcos que -durante 30 años- asolaron el país con asesinatos, secuestros, extorsiones y actos de terrorismo. Total…ya Nidia Aguilar, de la Procuraduría de los Derechos Humanos, dijo que antes, los mareros “accionaban por sus ideales”.
Mmmm, no, ¿verdad? Algo así no podría pasar…¿o sí?
“¡Ay!!, me dice Cándido y añade: “Usté sí que es inocente”.
