Cuando uno plantea que el ejercicio del poder debería estar limitado; y que el gobierno debería garantizar seguridad y justicia, en vez de dedicarse a constructor, a fomentador y docenas de actividades que sirven a los grupos de interés que viven del presupuesto del estado, no faltan las voces que gritan ¡Anatema!
¿Quién va a constuir vivienda para los pobres?, preguntan. ¿Quién les va a dar salud, o educación?, inquieren.
Para muestra, un botón: “Ni la comuna capitalina, ni el Ministerio de Comunicaciones quieren asumir la responsabilidad de darle donde vivir a los vecinos que se quedaron sin casa en el hundimiento de la zona 6”. ¡El responsable del hoyo es el que debe reponer las viviendas porque por dolo, o por culpa, se ha producido un daño a terceros! ¿Quién se hará responsable?
¿Y los maestros que son apóstoles de la educación pública? ¡En huelga!
Luis: Leer tus posts me obliga a leer las noticias de tu país o ciudad. Resulta interesante comprobar cuánto de semejante tenemos en latinoamérica.Me he interesado en el tema del derrumbe en barrio San Antonio. En este caso hay negligencia por parte de la empresa de aguas. Si el estado no se halla capaz de obligar a que esta empresa asuma los gastos que se derivan de su negligencia, entonces debe ser él, quien los asuma.Si el estado no actúa como regulador y garante del cumplimiento de las tareas de las empresas, entonces pasa a ser el que debe suplir necesidades, de manera directa.Mi humilde opinión acerca del tema.
Gracias, Daniel. En realidad este es uno de esos casos que lloran sangre, porque nadie le pone atención a la gente perjudicada. Animo con las noticias!!!