El aroma y el sabor de los mangos en dulce, así como los de los jocotes marañones y el dulce encanto de los corozos son anuncios inquívocos de que hay que sacar las bermudas y las sandalias. ¡Llegó la época de calor a Guatemala!
A algunos los llama la playa y a mí me llaman las montañas. Esta es la temporada en la que los cinco sentidos explotan con los estímulos más variados e intensos.
El sabor y el aroma de los mangos son inconfundibles y se infusionan en la miel que, en casa, sazonamos con canela, clavos, pimientas negras y pimientas de Chiapas. Yo me imagino que los mangos amarillos y brillantes son frutos que han capturado luz del sol y la traen a mi mesa para que me la goce.