Una posible alianza con la Alternativa Nueva Nación y la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca es analizada por el partido político Winaq, de Rigoberta Menchú. Una vez más la exguerrilla sin tapujos y la Premio Nobel de la Paz irán de la mano a una elección general.
Digo la exguerrilla sin tapujos, porque la exguerrilla vergonzante medra en la Unidad Nacional de la Esperanza, al amparo del oficialismo y de la socialdemocracia. Así, escondida del electorado y con aspecto de progre, la exguerrilla consigue posiciones importantes de poder; pero cuando compite con sus colores la historia es otra.
En los comicios pasados, la exguerrilla (socialismo real) con el auxilio de la Premio Nobel Rigoberta Menchú/Winaq, obtuvo 5.74% de todos los votos válidos a nivel nacional y eso que iba apoyada por Nineth Montenegro, la intelectualidad de izquierda, la comunidad oenegera, amplios sectores de la comunidad internacional y los progres. En su nativa Uspantán, ¡entre su propia gente!, Menchú consiguió sólo 2.78% de los sufragios válidos.
¿Y la a Alternativa Nueva Nación? Ah, la ANN por un pelo y desaparece.
En las elecciones pasadas, Menchú le atribuyó el fracaso al racismo, explicación que no tiene pies ni cabeza si se toma en cuenta que En Quiché, Menchú sólo consiguió 2.83% de los votos válidos. En Uspantán, el total que ha alcanzado asciende a 2.78% de los sufragios válidos. En Alta Verapaz, Sololá y Totonicapán, que como Quiché son indígenas en su mayoría, Menchú obtuvo 3.22%, 5.05% y 7.95% de los votos válidos, respectivamente. Si el racismo fuera un factor medianamente importante, ¿son racistas los indígenas que no votaron por Menchú? Otra duda que cabe plantear es: De aquel triste 2.83%, ¿cuántos votos fueron de Menchú y cuántos fueron de Montenegro?
[…] La Encuesta Libre hace preguntas por sexo y religion, pero no pregunta por étnia. Sin embargo, sabemos que Menchú no es la candidata favorita, ni entre su gente más cercana en Quiché. Sospecho que […]