Veintitres figuras extraordinarias, de 10 centímetros de altura y encontradas en un entierro de la fabulosa ciudad maya de Perú-Waka, pueden ser apreciadas en el Museo Nacional de Historia. Las estatuillas fueron halladas en la tumba de un gobernante que fue sepultado entre 600 y 650 d.c. y su restauración fue concluida en 2009. El conjunto ofrece información sobre el vestuario, los adornos y la relación del hombre con el inframundo; así como sobre las creencias y ceremonias de los mayas.
Yo visité Perú-Waka y el parque nacional de la Laguna del Tigre, donde convergen los ríos San Pedro y Sacluc a principios de este siglo. Allá aprendí algo sobre las hermosas guacamayas y sobre el cultivo de hierbas medicinales. Comprobé, con tristeza, que Perú-Waka había sido intensamente saqueado antes de que los arquéologos pudieran excavarla y estudiarla apropiadamente; que lo que queda allá es lo que los depredadores no quisieron llevarse, o lo que escapó a sus garras.
Afortunadamente, las figuras a las que hace referencia esta entrada no cayeron en manos de los saqueadores.
En la foto estoy en Perú-Waka. En esa ocasión viajamos de Flores a Paso Caballos; y de ahí tomamos lanchas por el río hasta llegar a un muelle. Luego caminamos por la selva hasta llegar a la ciudad maya. Esa noche dormimos en carpas en una estación para el cuidado de guacamayas.
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This entry was posted on martes, julio 20th, 2010 at 5:37 pm and is filed under Historia, maya.
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[…] fue hasta Segundo curso que visité Tikal por primera vez. También he estado en Mixco Viejo, en Perú-Waká, en Gumarcaj, en Kaminaljuyú, en Copán y en El Mirador. Y no importa si es una ciudad grande, o […]