Si no fuera trágico, daría mucha risa: La supuesta dirigencia popular que organiza los bloqueos y las actividades violentas como las del martes pasado quieren que baje el precio de la energía eléctrica; pero se oponen a la construcción de más hidroeléctricas y quieren que sean nacionalizadas la producción, transporte y distribución de electricidad.
¿Se acuerda usted qué pasaba cuando la mayoría de la energía eléctrica era nacionalizada? Pues resulta que no había. Y lo que había era apagones que, en los años 90 llegaron a durar como 6 horas y obligaron a mucha gente a comprar plantas costosas y de alto mantenimiento. De hecho, el colapso de la producción nacionalizada de energía eléctrica obligó al estado a contratar generación de emergencia y en condiciones que luego serían objetadas, precisamente por onerosas.
¿Se acuerda usted qué pasaba cuando la telefonía era nacionalizada? Pues resulta que no había. Conseguir una línea fija podía requerir de 4 años de espera y de numerosas mordidas.
¿Se acuerda de cuando había una línea aérea nacionalizada? No tenía aviones propios, y era una fuente espectacular de corrupción y de desperdicio.
¿Qué pasó con los ferrocarriles nacionalizados? Se convirtieron en chatarra y dejaron de funcionar. ¿Qué pasaba con el correo nacional? Dejó de funcionar completamente, a ver si a usted no se le olvidó, ya, cuando dejó de haber correo.
Toda esa dirigencia popular que se opone a las hidroeléctricas, que quiere que los políticos retomen el control de ciertos servicios, y que engaña a la gente haciéndola creer que con eso mejorarán su situación económica y su calidad de vida, no sólo son unos irresponsables, sino unos canallas.
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This entry was posted on jueves, octubre 29th, 2009 at 4:49 pm and is filed under dirigencia popular, energía eléctrica, manifestaciones.
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No podria estar mas de acuerdo.
En mi caso muy particular, he tenido múltiples experiencias desagradables con el sistema de correo, desde que fue dado en concesión a una empresa, que resultó ser mas deficiente que la estatal.Cuando el servicio era administrado por el estado, envié y recibí mucha correspondencia a diferentes países, ahora no puedo hacer compras por internet porque nunca recibo nada, ni siquiera los estados de cuenta del celular llegan y las excusas que me dan en "servicio al cliente", son irrisorias.Cuando compro algo en el extranjero, me veo obligado a pagar extra, por el servicio de un courier internacional, algo que nunca hice cuando el correo fue manejado por el estado.En el caso de los ferrocarriles, de pequeño viajé muchas veces a la costa sur desde la capital, ida y vuelta, un viaje maravilloso, al ser mayor hice un par de viajes a la costa atlántica y en los dos casos, la experiencia fue muy buena y agradable. Cuando se privatizó, el servicio empezó a ser deficiente, no hubo transporte de pasajeros y las malas administraciones lo llevaron a la quiebra.En los dos casos (correo y ferrocarriles), la idea supuestamente, era la de mejorar el servicio, pero al no tener ninguno de ellos, otra empresa para competir, simplemente o prestan un servicio deficiente o la llevan a la quiebra. Algo que no sucedió en la telefonía, porque ahí si hay competencia, te aseguro que si solo existiera Telgua que antes fue Guatel, seguiríamos esperando 4 años por el teléfono.Saludos Luis.