La decisión de si un candidato puede participar, o no en las próximas elecciones debe hacerse de conformidad con la ley; es decir que debe ser una decisión jurídica, no política.
No se le debería negar la participación a candidato alguno que llene los requisitos de para serlo…y en el caso de los requisitos ambiguos, el esfuerzo por producir una resolución apegada al respeto a los derechos humanos y a los principios generales del derecho y al tenor de la ley debería ser el mejor esfuerzo.
Dicho lo anterior…sólo por fantasear y por tener alqo que escribir hoy….dime si no sería divertido que Jordán Rodas fuera inscrito. Dime que no sería divertido que recibiera el mismo trato -por parte del electorado- que recibieron Rigoberta Menchú (cuando fue candidata de su partido Winaq), de Manuel Villacorta cuando fue postulado por el mismo partido que Menchú y Álvaro Colom (cuando fue candidato de la URNG). Sería un dhiste que recibiera el mismo trato electoral que han recibido otros candidatos del colectivismo más radical.
Aquello sería más divertido que aguantar cuatro años la zanata de la víctima por parte del candidato frustrado y sus fans.