En un día como hoy, 2 de septiembre de 1946, la filósofa y novelista Ayn Rand empezó a escribir La rebelión de Atlas y por eso es que hoy celebramos el Día de La rebelión de Atlas; además a lo largo de la obra esa fecha aparece en varias ocasiones.
En el mes en que celebramos la desvinculación de Guatemala como parte de las Españas, es chulo recordar que en la novela, Guatemala es mencionada dos veces:
[Cuffy Meigs]…vendía rieles a Guatemala o a compañías tranviarias de Canadá, cables a fabricantes de fonógrafos y durmientes como combustible para hoteles de centros turísticos, dice en el capítulo V de la tercera parte de la novela. Meigs, por cierto, es un saqueador que medra en la crisis, al amparo de los políticos…¿te parece familiar?
Coincidentemente, ese capitulo comienza con: La mañana del 2 de septiembre un alambre de cobre se rompió entre dos postes de teléfono, junto a la línea de la vía del Pacífico, de Taggart Transcontinental. ¿Viste? El 2 de septiembre y Guatemala en el mismo capítulo.
La República popular de Guatemala -escribían los periódicos del 26 de enero- rechaza el pedido de los Estados Unidos de mil toneladas de acero. dice en el capítulo VIII d la segunda parte de la novela. Este capítulo aborda el enfrentamiento entre la fuerza bruta y el intelecto; y el hecho de que los humanos necesitamos de libertad política para sobrevivir.
Aquella novela célebre fue publicada en 1957. ¿Qué pasó en la historia de Guatemala entre 1946 y 1957 que pudiera llamar la atención de la filósofa a tal punto de que incluyera a a este país, ¡dos veces!, en su novela monumental? Luego del período revolucionario que es cooptado por el socialismo, e incluso por políticos e ideólogos marxista-leninistas, en 1954 -y con el apoyo del gobierno de los Estados Unidos de América- los guatemaltecos llevan a cabo La liberación contra un gobierno cada vez más radicalizado hacia el socialismo. Guatemala tuvo que estar en las noticias con bastante frecuencia, sobre todo a partir de 1949 cuando el régimen revolucionario empieza a deteriorarse gravemente luego del asesinato del candidato opositor.
Independientemente de cualquiera otra causa -y quizás la respuesta se halle, o no en la correspondencia y archivos de Rand- la lucha de los guatemaltecos por su libertad, contra el colectivismo y el potencial totalitarismo podría haber llamado la atención de la autora.