¿Cuantas de ustedes -qué están leyendo- alguna vez dijeron?
– Si mamá ya lo sé; pero vamos a estar en la casa de unas amigas.
– Si mamá, en tus tiempos quizás era diferente; pero ahora es como es.
– Si mamá, entiéndeme, tu fuiste joven alguna vez.
– Ay mamá, eso es ridículo se van a reír de mi.
– Ay mamá, ¿por qué te inventas cosas?
– Ay mamá, ¿qué crees que ando haciendo locuras?
– Ay mamá, solo mis amigas me comprenden.
– Ay mamá ¡Por qué desconfías de mi? Así no se puede.
– Mirá mamá, a la primera oportunidad me voy de la casa ya que nunca me dejas en paz.
– Mamaaaaá, voy de salida, cuando regrese arreglo, limpio y ordeno lo que quieras, ahorita déjame en paz.
– Mamá, no dejas que me concentre, ¿por qué tienes que estar repitiendo siempre lo mismo? Ni que no te escuchara.
Y ahora… ¿a cuántas de ustedes ya se lo han dicho?
¡Feliz Día de Las Madres! A Nora, por supuesto; con mi admiración, amor y agradecimiento….y a todas las madres que visitan Carpe diem.
El texto fue ocurrencia de Raúl.