El artículo 92 de la Ley Electoral y de Partidos Políticos dice: No podrá suspenderse un partido después de la convocatoria a una elección y hasta que ésta se haya celebrado; de modo que aunque una de aquellas roscas electoreras (mal llamadas partídos políticos) incurriera en los supuestos del artículo 21 inciso f, que prevé la cancelación de la personalidad jurídica de los partidos, esta no puede ser una sanción posible luego de la convocatoria a elecciones. Si la ley no faculta a la autoridad electoral a suspender un partido, menos estará facultada, la autoridad, para cancelar una organización política.
Todo el que visita este espacio sabe que estoy convencido de que #NoTeTocaBaldizon #NoTeTocaBaldizon #NoTeTocaBaldizon; sin embargo el No te toca debe materializarse en las urnas con la participación de la ciudadanía reponsable y como consecuencia de maniobras güizacheras, y menos como consecuencia de la presión y la extorsión de grupos de interés constituidos en grupos delincuenciales.
Hay una coalición perversa de intereses que:
1. Quiere suspender las elecciones.
2. Quiere desprestigiar al Tribunal Supremo Electoral.
3. Quiere eliminar a Manuel Baldizón y a su partido Lider de los comicios
4. Acusa de legalistas a quienes señalan que hay que respetar la ley y los procedimientos constitucionales y legales y a quienes se niegan a apoyar un rompimiento constitucional con tal de conseguir objetivos políticos de corto plazo y a conveniencia de aquellos grupos de interés.
5. Instaurar un gobierno provisional a dedo.
Aquellos grupos de interés son el león que juzga por su condición y en la tradición del adagio que aconseja follow the money, habría que explorar quién y quiénes se beneficiarían inmediatamente con la suspensión de las elecciones, el desprestigio del TSE, la eliminación arbitraria del candidato que encabeza las encuestas y con el colapso del sistema constitucional y legal sobre el que descansan las elecciones, el cambio pacífico de autoridades y el sistema precariamente republicano.
Sospecho que son los mismos grupos que estropearon los plantones de los sábados y sospecho que las raíces de aquellas pretensiones se hallan dirigentes que sostienen la idea de que sobre el conjunto de las relaciones de producción se levanta la superestructura jurídica que son las formas ideológicas gracias a las que las personas toman conciencia del conflicto entre las fuerzas de producción y sus relaciones. En ese contexto, el derecho y la legislación están en función de las relaciones de producción de su época y por lo tanto no existe nada absoluto, ni definitivo en ese sentido. De ahí que, según ellos, el estado y el derecho no sean nada más que la expresión de la voluntad dominante de aquella clase que detenta el poder del estado. Sobre este andamiaje les es posible a los dirigentes de aquellos grupos sostener que la legalidad, la justicia y el derecho sólo son palabrería sin valor teórico y por eso no les incomoda violar la ley para conseguir los propósitos políticos que sirven a sus intereses. ¿Cachaste?
Por supuesto que si no respetan la ley electoral, Baldizón y Lider y cuales quiera otros contendientes deben ser sancionados, pero de acuerdo con la la ley y de acuerdo con el principio de que nulla poena sine lege; si el TSE baja la guardia y permite los abusos hay que llamarle la atención, pero no a costa del estado de derecho y al margen de la ley en respuesta a presiones y a chantajes. Es absurda la pretensión de gritar anatemas contra la corrupción al mismo tiempo que se pide el irrespeto a la Constitución y a las leyes.