¡Por poco y se me olvida celebrarlo! El Consejo Constitucional francés anuló el impuesto del 75% para los ingresos superiores al millón de euros, que figuraba en el proyecto de ley de finanzas de 2013 del Gobierno socialista de François Hollande, por considerar que viola el principio de igualdad en las cargas públicas.
A mediados de diciembre el actor Gérard Depardieu anunció al primer ministro de Francia, el socialista Jean-Marc Ayrault, que devuelve su pasaporte francés tras considerarse insultado por quienes han criticado su exilio fiscal a Bélgica. Le devuelvo mi pasaporte y mi seguro social que nunca utilicé. No tenemos la misma patria, yo soy un verdadero europeo, un ciudadano del mundo, como siempre me lo inculcó mi padre, dijo el actor.
Depardieu es el más reciente de un grupo de millonarios galos -entre los que se cuenta Bernard Arnault, propietario del grupo de lujo LVMH y el hombre más rico de Francia- con domicilio fiscal en Bélgica, que les ofrece grandes ventajas fiscales sin tener que obtener la nacionalidad belga.
Pues que saquen sus negocios de Francia. Si no les gusta que inviertan en otro país y ya está. Lo que no puede ser es que alguien obtenga beneficios de un país y luego no tribute en ese país porque no les gustan las reglas. Por ejemplo los atletas españoles que se benefician de la representación de su país pero luego tributan en Andorra, no es justo, entonces que jueguen con Andorra.