Eloy Amado Herrera, poeta guatemalteco, era conocido -con todo respeto- como Eloyito Amado. Encontré esta placa en recuerdo suyo en la Universidad Popular; y hace unos meses me acordé de su nombre cuando vi la película No mires para abajo .
Hoy, que para los chapines es día de ir a visitar cementerios, les recomiendo la historia de Eloy (homónimo de don Eloyito) ; un adolescente de Buenos Aires que anda en zancos y trabaja en la marmolería de sus padres repartiendo lápidas en las sepulturas que atiende el negocio familiar en La Recoleta. Eloy también trabaja de empanada; y si te abochornan las escenas sexuales, especialmente si son tántricas, esta no es peli para ti.
Eso sí; si te gustan las historias buenas, te la recomiendo.