El maestro Jorge Sarmientos, músico extraordinaire, falleció ayer. Cuando yo estaba en los últimos años de la Secundaria, solía ir con un grupo de amigos al Conservatorio Nacional de Música para escuchar los conciertos de la Orquesta Sinfónica Nacional; y nos gustaba mucho ir cuando dirigía Sarmientos, no sólo por la calidad de su dirección, sino porque nos gustaban sus repertorios y porque era impresionante verlo dirigir. ¡Que energía, que movimientos, que pasión!
En tiempos de La Revolución, Sarmientos perteneció al grupo Saker-Ti, en el cual muchos de sus miembros pertenecían al Partido Comunista. Fue, también, uno de los pocos ha tenido la dignidad de devolver la Orden del Quetzal por cuestiones de conciencia. Alfonso Bauer Páiz y Manulel F. Ayau, para citar a dos, hasta han rehusado recibirla. Por cierto que, años después, Sarmientos compuso la hermosa y emotiva música para el Himno de la Universidad Francisco Marroquín, cuya letra inspiradora es de Rigoberto Juárez-Paz.
Con la muerte de Sarmientos, los guatemaltecos perdemos a un gran músico.
No entiendo lo de la orden del Quetzal. Podria decirme por que la devolvio? Porque Se la dieron a Fidel o algo mas?