Cuando era adolescente, mi abuela me regaló The New Book of Etiquette, por Lillian Eichler, con la idea de que me fuera civilizando. Y si…aprendí muchas cosas útiles de aquel volumen de los años 40; aunque muchas de ellas ya no tenían sentido a finales de los 70 (cuando lo leí), y muchas de las circunstancias sociales del siglo XXI no podrían ser ni haber sido imaginadas por la señora Eichler. He aquí tres:
1. La mala práctica de personas que acuden al teatro, o a conciertos y graban escenas enteras con sus cámaras digtales. Con las pantallas de aquellas cámaras fastidian a sus vecinos.
3. La mala práctica de personas que, en teatros, o conciertos, toman fotos con flash. Con eso no sólo fastidian a sus vecinos, sino que distraen y molestan a los actores, e intérpretes, con el agravante de que los fotógrafos están a distancias en las que el flash de todas formas no sirve de nada.
3. Este es un buen consejo para incluir en correos electrónicos con múltiples recipientarios: Este correo va enviado a varias personas; sin embargo no ves sus direcciones anotadas. ¿Por qué? Porque es importante respetar a nuestros contactos y proteger su privacidad. Así les evitamos ser víctimas de correos no deseados o “spam”. Tampoco puedes ver las direcciones de todos los remitentes anteriores, puesto que también ellos tienen derecho a que se respete su privacidad. Si piensas reenviar el presente correo, por favor borra mi nombre y mi dirección antes de reenviarlo. Es buena práctica, también enviarles los correos a tus contactos con “copia oculta” (BCC o CCO) para que sus direcciones no aparezcan visibles. Proteje a tus amigos.
La foto es de dos señoras usando sus cámaras en el Teatro Nacional.