Riquísimas, riquísimas tortillas negras

A mí me gustan mucho las tortillas negras (¿o azules?).  La primera vez que vi tortillas de maíz negro, iba rumbo a San Juan Ostuncalco con mi tía Adelita. En algún pueblo ella le pidió a, Baltasar,  su chofer, que se detuviera y que fuera al mercado a comprar comida. Y Nuca volvió cargado con tortillas y queso.

Grande fue mi decepción cuando abrió la servilleta con tortillas porque eran oscuras; y yo nunca había visto tortillas de ese color. Las había visto blancas, por supuesto; y las había visto amarillas, que son hermosas y dan hambre. Pero estas, me dije, de plano que están enmohecidas. Y pregunté, para mis adentros, que qué le habría pasado por la cabeza a Nuca, para haber comprado tortillas pasadas.

Grande fue mi sorpresa cuando mi tía abuela preparó tres tortillas y nos dió una a cada uno. Ese fue el momento que escogí para preguntar si las tortillas estaban buenas. Y grandes fueron las risas de la tía Adelita y de Baltasar cuando cacharon lo que estaba pasando. Y yo quedé grandemente azareado.

Por supuesto que el sabor de las tortillas negras con queso era delicioso; y, desde entonces, siempre que las hay me las gozo mucho. Su sabor es ligeramente más dulzón que el de las de maíz blanco, que son las más comunes.

Las de la foto las consumimos debidamente, acompañadas con guacamol.

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3 comments

  1. Roberto Molina Barrera

    las tortillas de maiz negro son una exquisites al paladar, sobre todo con queso fresco; yo las conoci de patojo, en casa de mi abuelo paterno, a el las cocineras le torteaban solo de maiz negro, y al igual, al verlas pense que estaban enmohecidas.-

  2. Hemos compartido su foto en nuestra página, le hemos dado el crédito correspondiente y queríamos hacerle saber que estamos muy agradecidos por la información que comparte, la hemos compartido con muchas personas que están fuera de Guatemala y que extrañan cosas como las tortillas negras.

  3. ¡Que alegre, Sofía!