Los amaneceres en el valle de la ciudad de Guatemala están soberbios. Este es el del lunes pasado y la luz en el cielo y en los volcanes permite colores y detalles extraordinarios. Todo ello combinado con la belleza de los edificios y con la frescura del aire del amanecer.
En la foto están el Volcán de Agua, a la izquierda; y luego le sigue el Volcán de Fuego -que normalmente está echando humo– y Acatenango. Este último tiene la particularidad de que cuenta con dos conos: Acatenango a la izquierda, y Yepocapa a la derecha.
Para una buena conversación sobre volcanes, vea la que tuve con el geólogo y vulcanólogo extraordinaire, Sam Bonis.