This entry was posted on lunes, septiembre 1st, 2008 at 11:57 pm and is filed under arquitectura. You can follow any comments to this entry through the RSS 2.0 feed. Both comments and pings are currently closed.
Carpe Diem significa Apodérate del día y resume bien mi visión del mundo. La libertad es el valor fundamental que guía mi vida y mis reflexiones en Carpe Diem. Vivo en Guatemala, un país que aún está por ser construido y en el que los derechos individuales y la igualdad ante la ley son precarios. Por eso, aquellos son mis temas favoritos para estos comentarios. Con todo y todo, este espacio -políticamente incorrecto- existe al amparo del artículo 35 de la Constitución de la República; y del 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (por si acaso). Me gustan la cocina, la lectura y la compañía de mi familia y de mis amigos. También me gusta pasar tiempo conociendo mi país y a su gente. Al perpetrar Carpe Diem comparto con mis lectores algunas reflexiones y experiencias en busca de lo que es bueno, lo que es bello y lo que es pacífico. ¡Por la libertad y la razón!
Que tal don Guicho!! Le cuento…Soy arquitecto de profesion y le puedo decir que aunque se ve el lenguaje popular o “vernaculo” como bien lo dice Vd., este ejemplo no es tan esperpentico como podria parecer, es decir, al menos hay algo de ritmo y un uso no tan barroco de texturas y colores.Lo peorcito que yo he visto se encuentran a la par de las principales vias de circulacion, dentro de cualquier area comercial de alguno de nuestros pintorescos pueblos del interior (aunque se pueden encontrar verdaderos mamarrachos dentro del “centro historico” de la capital). Saludos…
ahora si me quede en flypero supongo que esas casonas de los principales pueblos construidas a pura Remesa son un mejor ejemplo