Mi hija, y el señor

Tomar dinero ajeno por la fuerza es robo, aquí y en la Cochinchina. La gente normalmente se opone a este tipo de despojo, a menos que aquella expoliación ocurra como consecuencia de una decisión política (a cargo de los mismos políticos que la gente critica por corruptos e ineptos). Sin embargo, no deja de sorprender que la gente crea que está obligada a pagar impuestos, sin más.

Ahora que leo que el Fondo Monetario Internacional ha exhortado a la administración chapina para que impulse una reforma fiscal, en este año, con el objetivo de aumentar impuestos; y que la Comisión de Seguimiento del Pacto Fiscal anda muy activa, vale la pena hacer algunas reflexiones sobre el tema impositivo.

En mi humilde opinión, como tributario y como elector, ninguna reforma impositiva debería dar un paso más sin resolver los siguientes puntos:

Ni un solo centavo de los impuestos que pagamos debe servir para favorecer, promover, incentivar, financiar, subvencionar, proteger, ni fomentar intereses particulares, ni privilegios.

Hasta el último centavo de los impuestos que pagamos debe ser utilizado única y exclusivamente para el bien común. Entendido este como el bien de todos, no como el bien de algunos, ni como el bien de muchos.

Leo que de 332 municipalidades, 275 no pasan por la fiscalización de sus presupuestos por parte de la Contraloría de Cuentas; y quién sabe que cosas parecidas ocurren a todo lo ancho y todo lo largo de la administración. Luego, hasta el último centavo de los impuestos que pagamos debe ser fiscalizado de forma transparente.

Recuerdo que antes las facturas detallaban cuánto es que uno pagaba de Impuesto al Valor Agregado; posteriormente, ese detalle importante fue ocultado en las facturas para que la gente no estuviera consciente de que está pagando un tributo. Luego, todo habitante de la República debe cargar con su parte alícuota del costo de tener gobierno. Así, estoy seguro de que seríamos más cuidadosos con permitirles, o no a los políticos, usar nuestro dinero para favorecer los intereses particulares y los privilegios de quienes no ven nada malo en usar, para sus negocios y sus fines, dinero ajeno tomado por la fuerza.

Antes de que el más mínimo aumento de impuestos sea llevado a la mesa, siquiera, la administración debe garantizar plenamente que: no se usa el dinero de los tributarios para beneficiar a nadie en particular; todos cargamos con el costo de tener gobierno; el dinero de los tributarios no se desperdicia y no se pierde en corrupción; y se hace todo lo posible por recaudar eficientemente. Si así fuera, así sí baila mi hija con el señor.

Sólo en estas condiciones es posible admitir, con mucha cautela, que tomar dinero ajeno por la fuerza tiene alguna justificación: si todos contribuyen por igual, sin se usa para el bien de todos y si se administra honradamente.

Esto es, no sólo porque robar es muy malo; sino porque los impuestos tienen efectos que no son muy evidentes y que son perjudiciales. Por medio de los tributos (por altos, o por complejos) el gobierno puede destruir la base productiva que hace posible el desarrollo económico.

A estas alturas alguien dirá que exagero cuando digo que el cobro de impuestos es violento; pero, ¿habrá quien niegue que se llaman impuestos, precisamente porque no son donaciones voluntarias? ¿Habrá quién no recuerde que si uno no paga sus impuestos corre el riesgo de irse enchachado a la cárcel? El uso de la fuerza para tomar el dinero ajeno está ahí presente, aunque se nos olvide.

Pasadas aquellas precondiciones, sólo queda tomar en cuenta que, para que los impuestos no erosionen la capacidad productiva y competitiva de la población económicamente activa, deben ser neutros, lo que significa que no deben afectar los precios relativos para que no cambien la manera en que las personas valúan las cosas y toman sus decisiones. Y dicho lo anterior, el primer tributo que debería desaparecer, entonces, es el impuesto a los rendimientos del capital.

Publicada en Prensa Libre el sábado 14 de abril de 2007

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12 comments

  1. a los impuestos, por alli son un mal necesario, pero si afectan la producción y no se ven los beneficios son un mal inesesario

  2. Comparto su opinion al respecto, para los que tributamos el anhelo de cada uno es que nuestros impuestos sean utilizados de la mejor manera como dice su post para el bien comun, pero al leer las noticias y ver que por ahi anda alguien queriendo endeudarnos para beneficiar a algunos pocos que por codicia o ignorancia invirtieron sus fondos en un banco que les ofrecia altos rendimientos sin tener que dar cuenta de ello al fisco, como que a uno le dan ganas de ya no pagar solo porque las consecuencias de no hacerlo nos perjudican que si no…

  3. Muy a mi pesar voy a hablar bien de los impuestos. Una cosa es el mal uso del dinero público y de sus corruptelas y otra es el beneficio global que sacamos todos del pago de impuestos. Todos creemos que gestionaríamos mejor el erario público, seguro, pero no pagar impuestos empobrece un país. Si son abusivos, o los gestores son unos ladrones, perjudica la imagen de un dinero que en un principio debe beneficiar y mucho a los ciudadanos de un pais. Lo que hay que terminar es con la repugnante corrupción.

  4. 275 municipalidades sin fiscalizacion! Es increíble. Me pregunto que hace la Contraloría de Cuentas al respecto. Si los impuestos son una fuente de ingresos que no han requerido fiscalización, que ira a pasar con ese aumento de impuestos? A rio revueto ganancia de pescadores dicen por alli

  5. Hola. Mi argumentación va en la línea de si el fin justifica los medios. ¿Es legítimo tomar dinero ajeno por la fuerza, para perseguir fines con los que el dueño del dinero no está de acuerdo? Independientemente de si esos fines son “buenos”, o no. ¿Es legítimo que yo le quite a alguien el fruto de su trabajo para subsidiar mis intereses, digamos: el beisbol, el futbol, la orquideología, la astronomía, o mi empleo?Saludos

  6. Ernesto Rodriguez Mahr

    Que hay de los prestamos (impuestos diferidos) Cualquier prestamo que desee contratar el Estado, debe de someterse a una consulta popular.

  7. leo en la prensa española que 600 poliías seran botados de su trabajo en Guatemala. Sé que no es el tema de tu post, pero pàrece una medida contundente…saludos

  8. Aqui la polcicía está involucrada en robos, secuestros, asesinatos, extorsiones, y demás. Esos que serán “botados de sus trabajos”, algunos ya les fueron probados hechos anómalos y fueron amparados por un tribunal y siguen en la Policía sin trabajar pero ganando sueldos y haciendo quién sabe que. A la Policía hay que depurarla y reformarla de fondo. De verdad es un problema muy serio porque en la calle da miedo cuando a uno lo detiene la policía.Uno no sabe si es para secuestrarlo, para extorsionarlo, o para que.Ha policías buenos, claro, pero la organización está corrompida en todos sus niveles.Es una lastima.

  9. Así que tú eres Luis F.P. o Luis Pujol ¿Y por qué te ocultabas? ¿Para mostrar tu cara más reaccionaria con libertad?

  10. Anónimo: Normalmente te he tenido paciencia; pero está visto que estás en nada. Si sigues escribiendo quizás publique tus necedades; nomás para que no chilles. Sin embargo, creo que no vale la pena ponerte atención. Get a life.

  11. Rodrigo Duarte

    Se ocultaba para mostrar su verdadero rostro de cobarde.Mano dura contra la pobreza y el analfabetismo.General Otto Pérez Molina, presidente de Guatemala

  12. Ustedes si que no le atinan.