20
Ene 09

En busca de la piñata perdida

¿Se da usted cuenta? El mismo tipo de políticos que luego hay que andar persiguiendo por México y Panamá, porque hacen chinche con el dinero que toman de los tributarios, ahora quiere que no haya límites para el manejo casi arbitrario y discresional de los Q20 mil millones del presupuesto del estado. Hoy leemos que “con el argumento de que se requiere de flexibilidad para enfocar recursos a paliar los efectos de la crisis económica mundial, el Ejecutivo buscará eliminar del presupuesto del Estado los candados a varias entidades —que tienen Q20 mil 874 millones asignados”.

Súmele esto a la irresponsabilidad de aconsejar que el gasto público sea elevado, para enfrentar la crisis, y lo que vamos a tener es una piñata de gastos, una orgía de desperdicios y una fiebre de endeudamientos que, en el mejor de los casos, no será sino pan para hoy y hambre para mañana, cuando no sea puro saqueo y abuso político.

Si de verdad queremos salir de la crisis, lo que hay que hacer es ser prudente en los gastos; y además, respetar los derechos individuales de los trabajadores, devolverles sus ahorros a ellos, incentivar la creación de empresas, mantener la apertura comercial y establecer el patrón oro.

Si quire más detalles sobre esta propuesta, del Centro de Estudios Económico-Sociales, por favor haga clic aquí.


15
Jul 08

El peligro de las bolas

Muchos chapines son happy triggers para las campañas negras, así como para levantar y hace rodar bolas; pero esas costumbres son muy feas. Como la impuntualidad, como la manía de hablar en diminutivo y como la habilidad para rehusar el compromiso, esas costumbres son de lo peor que ofrece la cultura chapina. La hora chapina, regáleme un cafecito, y primero dios se lo tengo para el martes, o para el miércoles, son ejemplos de aquellas costumbres nefastas.

En aquello pensé cuando leí, en El Periódico de ayer, quela intervención del Indymac Bank, en los Estados Unidos, se había originado en “los comentarios del senador Charles Schummer, quien expresó su preocupación por el estado del banco. La dudas del senador provocaron (sic) una corrida de US$1300 millones por parte de sus ahorrantes, lo que abocó al grupo a la quiebra por falta de liquidez”.

Hay pocas cosas tan asustadizas como el capital; y este ejemplo pone en evidencia el peligro de las bolas y lo importante que es expresarse con responsabilidad.


10
Mar 08

Después del trueno…

Después del trueno: Jesús María, dice un dicho que se aplica muy bien al desorden, caos y corrupción que reina en la entidad reguladora del transporte colectivo en Guatemala. Ahora resulta, también, que la Policía Municipal de Tránsito ha reportado 350 sanciones contra pilotos del servicio extraurbano.

Sin embargo, la solución para evitar los accidentes y la irresponsabilidad en el transporte colectivo extraurbano no es la de señalar la ineptitud de la administración para supervisar todos los servicios que debe supervisar. De hecho, cuando otra noticia u otra tragedia ocupen nuestra atención, los ojos del público y de la Prensa se volverán hacia otro escándalo y todo pasará sin que haya pasado nada.

La verdadera solución para evitar los accidentes y la irresponsabilidad en el transporte colectivo extraurbano pasa por eliminar los monopolios de las rutas, de modo que los usuarios puedan elegir entre quienes prestan el servicio de forma segura y responsable y eliminar a quienes no lo hacen así. La segunda parte de la solución pasa por los tribunales de justicia: si alguien viola la ley, debe tener la certeza de que será perseguido, juzgado y castigado si fuera hallado culpable.

Lo demás, todo eso de endurecer controles y aplicar multas, es sólo para tranquilizar conciencias y para aliviar la presión de la opinión pública.

En la calle donde vivo, por ejemplo, todos los días y principalmente los viernes en la tarde, docenas de personas (incluyendo pilotos de autobuses extraurbanos) “se meten contra la vía” y ponen en peligro la vida de los que circulamos correctamente. El año pasado, durante un par de semanas, hubo policías municipales poniendo mutas; y deben haber hecho una pequeña fortuna para la Municipalidad. Sin embargo, una vez que se retiran los PMT, la gente irresponsable vuelve a las andadas. Y así la vamos pasando.

Esta discusión es consecuencia del accidente de la semana pasada, en la carretera a El Salvador, que dejó más de 50 muertos.


03
Mar 08

Hipocresía y demagogia: 53 muertos

Un total de 53 muertos y 24 heridos fue el saldo de busazo del jueves pasado en la curva El Chilero, a 33.5 kilómetros de la ciudad de Guatemala rumbo a El Salvador.

Hasta ahora se ha comprobado que:

El autobús de La Cubanita, empresa que es propiedad de Héctor Ovidio González no tenía seguro vigente
El piloto, Robin Mauricio Chacón, no tenía licencia profesional
El bus no tenía equipo de emergencia
El bus iba a velocidad excesiva
El vehículo llevaba sobrepeso
La camioneta llevaba llantas reencauchadas
La empresa ya había sido multada por exceso de velocidad y por llevar sobrepeso

Este es un sólo caso y no es el único. Un accidente similar en 2002, dejó 32 muertos; otro, parecido pero en 2006, dejó 23 fallecidos; y uno más, en 2007 tuvo un saldo de 10 muertos. Sólo en 2006 murieron 191 personas en accidentes de vehículos del transporte colectivo extraurbano.

Ahora bien…la de la prestación del servicio del transporte extraurbano es una actividad altamente regulada y supervisada por la Administración por medio del Ministerio de Comunicaciones y su Dirección General de Transportes. Ellos, por ejemplo, conceden el monopolio de las rutas y deberían registrar y supervisar directamente a las empresas que prestan los servicios de transporte. La Administración, por medio del Ejecutivo, se responsabiliza de esos asuntos y claro, se “responsabiliza” tan mal como siempre.

Esto del transporte colectivo urbano no sólo está en manos del Ministerio de Comunicaciones; también se involucran Provial, las policías nacional y municipales, el Consejo Nacional de Prevención de Accidentes de Tránsito y Educación Vial (Hágame usted el favor) y quién sabe qué organizaciones más.

¿Qué le dice aquello a usted? El Banco de Guatemala debería velar por el valor de la moneda, y resulta que el metal del que están hechas las fichas vale más que la moneda en sí; el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social debería velar por la salud de los que cotizan en él y por los viejitos, las viudas y los huerfanos, y el IGSS es la cueva de Alí Babá; la Superintendencia de Bancos debería velar por los ahorros de los chapines; y cuando hay problemas reales, o ficticios en el sistema financiero, lo menos creíble entre el público es lo que diga el Superintendente. Uno puede seguir y seguir dando ejemplos; pero el punto es que ¿por qué es que la gente sigue creyendo que la Administración debe ocuparse de cuidar a la gente?

Lo que hace, en cambio, es quitarle la responsabilidad a la gente. Muchas personas creen que como la Administración vela por su seguridad ellos no tienen necesidad de hacerlo individualmente. ¡Y ese es un error grave, que muchas veces se cuantifica en número de cadáveres!

Por eso es que es hipócrita y demagógico que la administración socialdemócrata ponga la bandera nacional a media hasta por las víctimas del busazo de El Chilero; y por eso es algo cursi que el vicepresidente Espada visita a los deudos y a las víctimas.

Cuando se persiga y se castigue a los empresarios, pilotos y funcionarios responsables de las irresponsabilidades citadas arriba, ¡entonces! la Administración estará cumpliendoles a los que perdieron la vida o ahora lloran a causa del busazo. Lo demás es pura hipocresía y pura demagogia.


16
Feb 08

¿Qué clase de gallinas somos?

1.- ¡¿Qué clase de gallinas somos?! Alguien envía un correo electrónico desde alguna oficina y, como en un gallinero, los cacareos son ensordecedores.

La semana pasada circularon e-mails acerca de la supuesta quiebra del Banco Agromercantil, y el sistema financiero chapín fue puesto en jaque. ¿Qué dice esto, de la sociedad chapina?
Que haya un canalla capaz de iniciar aquellos rumores, no me extraña, pero lo que es embarazoso es que miles de personas estén dispuestas a ser cómplices, mediante el reenvío de los correos. ¿Saben qué voy a hacer la próxima vez que algún lector, conocido, amigo o pariente me mande uno de esos correos? Voy a publicar su nombre en http://luisfi61.blogspot.com/ Así voy a ayudar a ser responsables de sus acciones a los que, sin usar un poco de sentido común —ya sea de buena o de mala fe— colaboran para que funcione el terrorismo financiero.

Dado que la superintendencia correspondiente goza de una credibilidad que se cuantifica en números negativos, ha sido necesario que los clientes del banco perjudicado salgan en defensa de aquella organización bancaria. Uno mira los diarios y se encuentra con páginas de campos pagados cuyo precio es de por lo menos Q14 mil 500 cada uno. El total de estos gastos es escandaloso, si se toma en cuenta que no tendrían razón de ser si los chapines fuéramos un poco más responsables, o si la vez anterior, cuando ocurrió algo parecido con otro banco, alguien hubiera ido a parar a la cárcel por generar los correos pusilánimes.

Quizás los chapines deberíamos ser más creativos y positivos con nuestra capacidad de participación ciudadana. En vez de ser happy triggers para reenviar campañas negras, bien podríamos dejar claro que no toleraremos un alza a los impuestos, que nos indigna el desperdicio de recursos en el Congreso, o que urge una reforma constitucional integral que restituya el estado de Derecho. Usted no me crea, pero un cuate me contó que como consecuencia de los correos citados, una maestra reunió a los padres de familia de una escuela y les dijo que, si tenían cuentas en el banco citado, deberían cerrarlas. ¡No frieguen, muchá; hay formas más positivas de ejercer el liderazgo! ¡Hay causas más dignas de tanta energía!

2.— Armas sin registro: el viernes leí que en 85 por ciento de los delitos que son cometidos en Guatemala se usan armas que no están registradas. Pero ¿qué clase de delincuente pendejo registra su arma para luego salir y cometer crímenes?

Mi punto es que en la queja del Departamento de Control de Armas y Municiones, puesta como está, llevaría a pensar que un incremento en la calidad del registro de armas disminuiría la comisión de delitos mediante el uso de armas no registradas. ¡Y no es así!

La noticia nos revela que, aunque el Departamento de Control de Armas y Municiones (Decam) existe desde finales de los años 1980, en realidad es una dependencia inútil por su incapacidad técnica de cumplir con su cometido básico. Y la pregunta es: si no puede llevar registros apropiados, ¿para qué existe? ¿Para qué finge llevar registros, del todo?

Este es un mal típico de la administración pública. El Tribunal Supremo Electoral (TSE) regula lo relacionado con los comicios, pero a la hora de hacerse respetar, como en el tema de la propaganda electoral, o en el del financiamiento de los partidos, el TSE es el hazmerreír de los políticos. El Instituto Guatemalteco de Seguridad Social, que debería de proteger a viudas y lisiados, no es más que la cueva de Alí Babá.

¡El colmo es que el Decam no tiene registradas, ni siquiera, las armas de la Policía y del Ejército! Este es otro caso de cómo es que la administración da el mal ejemplo y por eso carece de autoridad alguna para hacer que se cumpla la ley.

Al final, la solución para la violencia armada no es solo que haya un registro eficiente, y mucho menos que se prohíban las armas. Como los delincuentes prefieren víctimas desarmadas, parte de la solución es que los ciudadanos honrados puedan portar armas ocultas.

Publicada en el diario Prensa Libre, el sábado 16 de febrero de 2008


17
Ene 08

¡Ve q´hijuela!

Las personas que conducen mientras hablan por su teléfono móvil deberían sufrir una maldición horrible. Algo espantoso. Algo que diera escalofríos.

Ayer, cuando iba a almorzar a mi casa, el sujeto que conduce el vehículo de la foto se me atravesó sin miramientos…y claro, iba hablando por su móvil.

Estuve así de cerca para golpearlo; y con el auto que maneja, el mío hubiera quedado hecho acordeón. El condenado talvez me hubiera pagado la compostura (o no); pero, ¿quién me hubiera pagado los perjuicios?


17
Abr 07

¿Independencia, o irresponsabilidad?

Ojalá que se vea bien; pero aquí va un chico como de 6 años. Va entre el tráfico montado en una bicicleta que le queda grande. Al principio admiré la independencia del chico; pero luego pensé que si se cae, o si pierde el control de la cicle, o lo atropellan, ¿de quién será la culpa? ¿Qué pasará con el pobre conductor que resulte involucrado en un accidente con este chico?