22
Ene 18

El daño que te causa la inflación

Si tienes tus ahorros en un banco terminas perdiendo.   Esto es porque el promedio de la tasa de interés que te pagan es de 4.79% y la inflación en 2017 cerró con 5.68%.

Visto así y a grandes rasgos, en lugar de que el valor de tu dinero se multiplicara -que es el propósito de ahorrar en una cuenta bancaria- lo que ocurrió es que tu dinero se devaluó 0.89%.

La gente cree que la inflación es el alza generalizada en el nivel de precios; y cree que cuando va al mercado y los aguacates ya no valen Q2, sino Q2.50 esa es la inflación.  Pero tu, que visitas este espacio con frecuencia, sabes que la inflación es un fenómeno monetario y que no es que los aguacates valgan más, sino que los quetzales valen menos y que, por lo tanto, tienes que dar más quetzales a cambio de la misma cantidad de aguacates. Los quetzales se ponen baratos frente a los aguacates.

Como la inflación es un fenómeno monetario (debido a la abundancia de quetzales en proporción a la cantidad de bienes disponibles) el responsable de la inflación (o sea de la abundancia de quetzales y su consiguiente pérdida de valor) es el que hace quetzales.  Del mismo modo en que el que produce aguacates (más allá de la demanda de esas frutas) es responsable de que los aguacates sean baratos, o que pierdan valor frente a los quetzales.

El caso es que debido a que los quetzales pierden valor debido a la inflación, si guardas la mayoría de tus ahorros en un banco, lo que está ocurriendo con tu dinero es que está perdiendo valor, en vez de ganar valor.  Por eso es recomendable usar el banco, no para guardar la mayoría de los ahorros, sino para depositarlos mientras encuentras una mejor forma de invertirlos y multiplicar su valor.

El año pasado -debido a los responsables de la inflación- perdiste 0.89% del valor de tus quetzales en el banco.


02
Abr 14

La raíz del conflicto de Chixoy

chixoy-el-periodico-felix-acajabon

La creencia de que los intereses colectivos prevalecen sobre los derechos individuales es la raíz del conflicto con los pobladores del área de la hidroeléctrica de Chixoy.  Es la misma creencia en la que están enraizados otros conflictos como el de la minería.

Si la Constitución, las leyes y quienes las ejecutan respetaran plenamente los derechos de las personas (como su derecho de propiedad aún sobre el subsuelo), no habría tales conflictos.  Si la Constitución, las leyes y quienes las ejecutan respetaran plenamente los derechos de las personas, aún frente a los reclamos y las exigencias de la colectividad, de la nación y del estado, no habría tales conflictos.

El caso es que -entre nosotros- prevalece la creencia falsa de que los derechos individuales deben estar sometidos a los intereses de el vecindario, la aldea, el país, el gremio, el sindicato, el gobierno, la nación, la étnia, la iglesia, y cualquier otro grupo que tenga un reclamo, o una demanda.

En una sociedad sana puede que los intereses colectivos prevalezcan sobre los intereses particulares; pero los derechos individuales no deben estar sometidos a los derechos de las personas individuales.  En una sociedad sana es inaceptable que se obligue a unos a dejar sus casas y sus tierras, sólo porque otros -que aparentemente son mayoría- las necesitan. Incluso si se acude a procedimientos democráticos.  Nadie debería de ser sacado de su casa y de su tierra, sólo porque otros votaron para que así sea.

La foto es por Félix Acajabón, de El periódico.


29
Ago 08

Una lección dura

Ahora que leo que hubo inversionistas privados que perdieron plata por haber hecho inversiones en la empresa Mecado de Futuros, S.A -y lamentando mucho que eso haya sucedido- se me ocurre repetir una lección básica e importante que los chapines no hemos aprendido ni con la experiencia de repetidos casos similares: Mientras más alta es la tasa de interés que ofrece un captador de inversiones; mayor es la posibilidad de riesgo que sufren esas inversiones.

Esto es porque quienes ofrecen inversiones más seguras no tienen necesidad de incentivar con tasas altas a los inversionistas potenciales. La tasa alta es, además y de alguna manera, una compensación por el riesgo eventual de las inversiones.

Esto ha sido así siempre y en todo lugar; y por eso es que es raro que la gente no escarmiente, luego de experiencias como Autocasa y muchas otras. Tanto las inversiones riesgosas, como las inversiones más seguras tienen sus funciones y propósitos particulares; pero es de personas responsables saber reconocerlas y una forma fácil de empezar a hacerlo es por la tasa que ofrecen.


25
Jul 08

El Banguat, fabricante de miseria

El Banco de Guatemala es uno de los peores fabricantes de miseria en Guatemala. Fabrica ese fenómeno monetario que se llama inflación y mediante ella les impone un tributo invisible a los chapines y les roba el poder adquisitivo de sus quetzales.

Luego de aquella maldad, el banco central intenta desfacer el entuerto que ha fabricado, mediante el alza en las tasas de interés. Y con ello encarece el crédito. En consecuencia, quienes están pagando sus casitas, y quienes querían ampliar la fábrica o mejorar los cultivos en las fincas, tienen que soportar una carga artificial.

Es evidente que la inflación y las tasas de interés altas castigan a los más vulnerables en el mercado, y no habría necesidad de subir las tasas si, en primer lugar, el Banguat no fabricara inflación.

Lo irónico es que en su propaganda, la administración socialdemócrata le echa la culpa del alza generalizada en el nivel de precios a los altos precios internacionales del petróleo y de los granos básicos (que la administración le atribuye a la especulación). Los pipoldermos no reconocen, ¡por supuesto!, que buena parte de aquella alza generalizada (que ellos llaman inapropiadamente inflación) es causada por la inflación propiamente dicha y que es fabricada por las autoridades monetarias chapinas.

Sin embargo, al elevar las tasas de interés para recoger exceso de liquidez (o sea la inflación que fabricó el Banco de Guatemala) los políticos reconocen implicitamtente el carácter monetario del fenómeno que le atribuyen a la especulación internacional.

Los pipoldermos podrían perderse en ese laberinto de inconsistencias y mentiras; y a nadie le importaría, si no fuera porque al fabricar inflación, y al fabricar cargas artificiales sobre los más vulnerables, no estuvieran fabricando -tambien- miseria para miles y miles de familias para quienes la vida en Guatemala es “un largo amanecer que nunca llega a ser día.”


04
Jun 08

No es la lucha de uno, es la lucha de todos

Es una lástima que la oposición a la servidumbre que generaría la aplicación de la Ley de Fomento para el Cultivo de Granos Básicos, esté siendo planteada como un enfrentamiento entre el agro y la administración. Prensa Libre destaca Pulso entre gobierno y agro por cultivo forzoso; Siglo Veintiuno dice La Cámara del Agro advierte que emprenerá acciones legales; y El Periódico anuncia que La Cámara del Agro rechaza la aplicación del decreto que los obliga a destinar el 10 por ciento de la extensión de las fincas para producir granos básicos.

Porque es de interés colectivo que los derechos individuales prevalezcan sobre los intereses colectivos; y no al revés, la oposición contra esta imposición debe ser de todos los que entiendan el valor de la libertad y de la propiedad como derecho individuales.

Aunque el uso de la coerción para alcanzar objetivos políticos, aún en violación de los derechos individuales, es una práctica común entre pipoldermos de los más diversos colores; esta práctica extendida debe encontrar un ¡Hasta aquí!, antes de que cunda como cáncer. Hoy es la obligación de sembrar granos, y mañana será la prohibición para importar ciertos bienes, o la obligación de
emitir obligaciones financieras, o la de manufacturar ciertos productos.

Como la libertad se pierde poquito a poco, y como tendemos a no preocuparnos cuando la libertad la pierden los otros, para los pipoldermos es fácil ir tomándola. La mejor defensa, empero, es que la sociedad cierre filas contra el avance de las regulaciones y las normativas que violan los derechos individuales.

No hay que engañarse con una presunta dicotomía entre la solidaridad y el ejercicio de los derechos individuales. El presidente socialdemócrata, Alvaro Colom, pretende hacernos creer que el uso de la fuerza para obligar a otros a hacer cosas que no harían en su sano juicio, no es intrínsecamente malo. De hecho, ha dicho que “es cosa de responsabilidad, no es cosa de propiedad privada; no estamos obligandoa nadie, es lo que manda la ley”.

El lenguaje surrealista que usa el mandatario es una manipulación y lo triste es que no falta quién se la trague. Ninguna supuesta solidaridad, y ninguna supuesta responsabilidad debe basarse en que los intereses colectivos tengan primacía sobre los derechos individuales. En el momento en que eso ocurre, el cáncer destroza el tejido social. Y eso, ¡No puede perjudicar más a los intereses de todos! Esta no es una lucha de unos, sino de todos; pero no es una lucha de posiciones, ni de porcentajes, sino de principios.


02
Jun 08

Buenas señales

El presidente Alvaro Colom anunció que les eliminará, permanentemente, el arancel de importación a 10 productos de la canasta básica (y los contingentes), con el propósito de aliviar la crisis que afecta a los guatemaltecos, derivado del alza de precios en los alimentos y combustibles. Los productos que serán liberados son: la leche en polvo, el maíz amarillo, los huevos de gallina, la harina de trigo, la harina de maíz, el aceite vegetal comestible corriente, toda la carne de pollo, el arroz de segundo, fertilizantesy agroquímicos genéricos.

De esta disposición, llama la atención que la eliminación de los impuestos de importación es permantente y que también acaba con los contingentes. La decisión es una buena señal que puede ayudar significativamente a la economía de los chapines.

¿Por qué es esto importante? Porque a diferencia de otras medidas que habían sido anunciadas antes, esta no constituye un privilegio, sino que elimina privilegios; esta no implica la intromisión estatal en la fijación de precios, sino que se aparta de mezclar la política con las decisiones puramente económicas; esta confía en el mercado -que “es lo que ocurre cuando se respetan la vida, la propiedad y los contratos”- en vez de confiar en la arrogancia de los planificadores de escritorio.

Aún administraciones con tan poco criterio económico, como la de Nicaragua, han entendido que más que controlar el comercio y los precios, su liberación es lo que puede ayudar mejor a la población. Es una lástima que lo comprendieran a las puertas de una crisis que puede llegar a la violencia, y no antes; porque desde hace mucho tiempo es que se sabe eso.

De vuelta a Guatemala, y antes de aplaudir de pie la decisión, es menester advertir que, siendo que ella implicará menos ingresos para el fisco, es importante que la medida venga acompañada de una racionalización del gasto y que no se busque llenar el vacío que dejarán los aranceles, con algún tipo de préstamo. Esto último neutralizaría la medida original y traería daños colaterales para los consumidores y los contribuyentes.

Otro detalle importante es que ya para estas alturas el Banco de Guatemala debería desistir del subsidio cambiario para los exportadores; política que mantiene artificialmente alto el precio de los dólares que les servirían a los chapines para comprar pollo, leche, maíz, harina, aceite, arroz, y fertilizantes a precios favorables, si no existiera el sobreprecio que mantiene el banco central.

En todo esto de los precios, el Banguat está jugando un papel determinante que debe ser revisado por las autoridades responsables. Adicionalmente al daño anteriormente mencionado, el Banco crea inflación al imprimir dinero para pagar las pérdidas en las que incurre al pagar las tasas de interés artificiales con las que pretende “esterilizar” ese mismo dinero que imprime. Con ello fomenta una demanda falsa que presiona los precios al alza, lo que empeora la situación creada por la escasez de alimentos a nivel mundial. Y por si eso no fuera suficiente, al elevar las tasas de interés, el Banco de Guatemala perjudica a quienes están pagando préstamos ya sea para vivienda, o para la producción; ya que las alzas en la tasa de interés castigan a las familias ya sea encareciéndoles la vivienda, o haciéndo artificialmente cara la inversión en capital que genera más y mejores empleos.

Lo de los aranceles es una buena señal porque anuncia que el buen juicio está privando sobre las consideraciones ideológicas y populistas. La eliminación de privilegios nunca puede ser mala; y menos si es una política permanente.


12
Abr 08

El derecho individual vrs. el colectivo

En esta semana recibí una valiosa carta de un lector. La suya ilustra un problema particular que enfrentan muchos guatemaltecos; pero a la vez es un problema general del cual no nos hemos dado cuenta.

Para hacer la historia corta, el lector vive en un sector de la zona 15 el cual algunos vecinos han decidido cerrar por seguridad y para ello han instalado una garita con sus costos y sus reglas correspondientes.

La carta se titula El derecho individual vrs. el colectivo; y a mi modo de ver hay dos formas de leerlo: la primera es como el derecho individual contra el derecho colectivo y en ese sentido me queda claro que los derechos son individuales y que no hay tal cosa como derechos colectivos.

De hecho, y eso nos lleva ala segunda forma de leerlo, los derechos individuales nos protegen contra el colectivo o la comunidad.

Los derechos, a saber, son tres: vida, libertad y propiedad; y si como individuos no tenemos la facultad de quitárselos, arrebatárselos, o impedirles su ejercicio a los demás, como individuos tampoco tenemos la facultad de delegarle a la comunidad, o a sus representantes, la facultad de quitárselos, arrebatárselos o impedirles su ejercicio a los demás. No podemos darles a otros facultades que no tenemos como personas individuales.

Un derecho es una facultad de las personas individuales que se ejerce sin necesidad de pedir permiso a nadie, ni a costas de nadie. Como los derechos son inherentes a los seres humanos, eso quiere decir todas las personas individuales gozan de los mismos derechos, siempre. Luego, la única obligación implícita en el ejercicio de un derecho es el respeto de los derechos ajenos.Los seres humanos, como personas individuales, tenemos derechos. Los grupos no. Los derechos los gozan los individuos no porque el grupo se los conceda, ni los goza para bien del grupo, sino que los goza para defenderse de la colectividad y de los otros. Cualquier cosa, parecida a un derecho, de la cual gocen sólo unos, y no todos los miembros de una sociedad; cualquier imitación de derecho de la que las personas gocen de cuando en cuando; cualquier pseudoderecho que para disfrutarlo haya que pasar sobre los derechos ajenos; y cualquier otra gracia que concedan la colectividad, o el tirano de turno, no son derechos, sino privilegios.

Lo que creemos conocer como derechos colectivos, en realidad son intereses colectivos. Una de las razones por las que la sociedad guatemalteca es una sociedad enferma es porque demasiadas personas creen que los intereses colectivos deben prevalecer sobre los derechos individuales. Nótese, por favor, que no he dicho –como malintencionadamente se da a entender en algunos círculos- que los intereses individuales deben prevalecer sobre los intereses colectivos. Este es otro asunto que no voy a discutir ahora para no distraer del tema principal.

En una comunidad, o en una sociedad sana, los derechos individuales deben prevalecer sobre los intereses colectivos.

Dicho lo anterior, si yo viviera en un área que puede ser cerrada y protegida con garitas, estaría de acuerdo con que así se hiciera. Empero, es mi opinión que todos los propietarios y los que alquilan en el área deben estar de acuerdo con el alcance de las garitas y con el pago de su costo. Es decir, que debe ser una decisión de consenso, y no por mayoría.

La razón de aquello es que la instalación de la garita y sus costos son circunstancias que alteran las condiciones de vida, posteriormente al momento en el que los propietarios y arrendatarios decidieron mudarse al lugar. Y la situación es diferente cuando alguien llega a vivir a un lugar donde ya hay garita y se conocen los costos de la seguridad, pues no le queda más que aceptar las condiciones preexistentes.

Visto desde otro punto de vista, ni una mayoría, ni una minoría, tienen facultades para exigir que otros contribuyan a satisfacer sus necesidades de seguridad; ni siquiera en defensa de su derecho de propiedad, o su derecho ala vida.

Así como un individuo no puede exigirle a otro, u otros, que le de dinero para satisfacer sus intereses, necesidades y aficiones; así es como un grupo de individuos (sin importar su tamaño) no puede exigirle a otro grupo que le entregue su dinero para satisfacer sus intereses, necesidades y aficiones.

La única forma de cambiar legítimamente las condiciones que afecten los derechos individuales en un lugar como el descrito (o en una sociedad) es por consenso. Por mayoría, es absolutamente inaceptable.

Claro que nos han educado a respetar las decisiones democráticas (tomadas por mayoría); pero lo que no nos han dicho es que las decisiones mayoritarias deben estar limitadas por el respeto irrestricto a los derechos individuales de la minoría; y la minoría más pequeña es la minoría de uno.

El respeto a la vida, la libertad y la propiedad de unos, no debe estar sujeto a decisiones mayoritarias (y menos minoritarias). Sólo así podemos tener comunidades sanas, y una sociedad sana.


24
Nov 07

Parió la abuela

Vamos a ver…el petróleo y la gasolina están subiendo de precio. El maíz, el trigo, las tortillas y el pan, también están más caros.

Por cierto que, en buena parte, el alza en los precios del maíz se debe a que la producción maicera, en el mundo, está siendo utilizada para producir etanol subsidiado. Pero eso es otro tema.

El martes leí, en Prensa Libre, que el crecimiento económico en Guatemala está en riesgo debido a los factores citados arriba, a desaceleración de la Economía en los Estados Unidos de América y a la disminución del flujo de las remesas.

En medio de aquel panorama, ¿qué se les ocurre a las autoridades monetarias en la Tierra del Quetzal? Se les ocurre agravar la situación mediante la elevación del costo de la vivienda. Con el consecuente daño para quienes están pagando sus casas, o para quienes ya no podrán, ni siquier,a soñar con empezar a adquirir vivienda. Y eso sin contar el perjuicio para albañiles, carpinteros, electricistas, plomeros y otros operarios especializados que se quedarán sin empleo.

¿Cómo así?, dice usted. El jueves pasado los integrantes de la Junta Monetaria aplicaron el tercer aumento de este año a la tasa de interés líder. La tasa subió 0.25 puntos porcentuales y se ubica en 5.75 %. Esa tasa es la que les paga el Banco de Guatemala a las organizaciones financieras que invierten su liquidez en Certificados de Depósitos a Plazo; y la idea es controlar, con ello, el exceso de liquidez o inflación, que a su vez es ocasionada por las autoridades monetarias.

¿Y qué tiene que ver esto con el encarecimiento de la vivienda?. Pues bien, en la venta de viviendas a largo plazo, el costo principal de la mensualidad que uno le paga al banco que le prestó el dinero para comparar la casa, son los intereses. Por ejemplo, si aquellos andan por 8% y las autoridades monetarias presionan para que suban a 9%, el aumento en los pagos será de 12.5 %, que en una casa de Q100,000 suma Q12,500. Ese encarecimiento, además, descalifica a muchos para obtener el crédito necesario.

A grandes rasgos, lo que ocurre es que si la tasa líder que paga el Banguat es elevada, las otras tasas también tienen que subir para ser competitivas y atraer liquidez. Eramos muchos, y parió la abuela. Ya están caros los combustibles y los alimentos, ¿qué necesidad hay de que se encarezca el crédito y que con él se encarezca la vivienda?

Los chapines ya tropezamos con esta piedra no hace mucho. El desatino de finales de los noventa, de subir los intereses para “que no se calentara la economía”, causó una gran crisis de quiebras de empresas y de personas, la construcción e industrias conexas prácticamente fueron paralizadas y al partido de gobierno (que entonces era el PAN) le costó la reelección.

Otro ejemplo reciente de los efectos nefastos que tiene la manipulación de intereses nos lo están dando los Estados Unidos de América con la crisis de vivienda que está afectando toda su economía. Es obvio que las autoridades monetarias del gigante del Norte no previeron las consecuencias que tendría el alza de intereses, luego de haber fomentado la compra de viviendas mediante intereses bajísimos. Aquello pone en evidencia lo difícil que es anticipar las consecuencias del manipuleo de intereses. Y la razón es que ¡nadie sabe, ni puede saber, lo suficiente como para prever esos efectos de inestabilidad del precio del crédito! Lo aconsejable es dejarlo al mercado, porque en él no hay sorpresas súbitas y porque refleja todos los fenómenos económicos atingentes que ¡nadie puede conocer!

La industria de la construcción es la más grande del país, es la que ocupa más gente, y además paga impuestos. Si el alza artificial en las tasas de interés la empieza a paralizar, el impacto será grande. La mejor manera de equilibrar la liquidez con la demanda es no impidiéndola.

Esta columna ganó el Premio Charles L. Stillman para columnas de periódico, en 2008.

Publicada en el diario Prensa Libre el sábado 24 de noviembre de 2007