La dirigencia popular y sindical ensucia


El viernes, después de la marcha que organizaron los sindicatos para celebrar el Día del Trabajo fui al centro para mostrarle la ciudad a una visitante de Virginia, EUA.

Fui con ese propósito y con el de ver las pintas que la dirigencia sindical había hecho en la Sexta Avenida del Centro Histórico. Tanto mi cuata, Rosemary, como yo estábamos indignados. No sólo por la suciedad que dejaron los sindicalistas; sino por la abundancia de hoces y martillos, el símbolo del socialismo real, que es como si un grupo de manifestantes hubiera pintado esvásticas, el símbolo del nacional-socialismo. Sólo que peor.

A Rosemary y a mí nos conmovieron dos escenas: la de una mujer -que fotografíé junto a la estatua mutilada de Tasso Hadjidodou- que expresó: Que mala esa gente que hizo eso; y la de los grupos de jóvenes que se dieron a la tarea de limpiar la inmundicia que dejaron los manifestantes. Ojalá que cuando recuerden la suciedad que tuvieron que limpiar, también recuerden la abundancia de ominosas hoces y martillos.

¿Malos? ¡Malísimos, y de hecho, criminales! Los muertos del socialismo real se cuentan por millones. Los muertos en la República Popular de China, entre 1949-87, se estima que llegan hasta 76,702,000. En la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, entre 1917-87, se calcula que llegan hasta 61,911, 000. Durante los soviets de Mao, en China, puedes añadir otros 3,468,000. En Corea del Norte, entre 1948-87, hubo unos 1,553.000 de muertos (¿Cuántos habrán muerto de hambre y frío entre 1988 y 2012?). En Camboya, entre 1975-79 (en sólo 4 años) hubo 2,035,000. Todos estos muertos y más en regímenes socialistas de uno u otro color. Todos ellos, poco más o menos unidos por símbolos comunes como la hoz y el martillo, y las banderas rojas y negras.

Al utilizar símbolos de regímenes (y de filosofías) criminales para pintar paredes y destruir monumentos, la dirigencia popular chapina -que alienta, o tolera- el uso de hoces y martillos, no sólo pone en evidencia sus raíces y vinculaciones políticas reales; sino que radicaliza el diálogo político e introduce elementos de violencia que fueron pesadillas en los años 60, 70 y 80 cuando le guerrilla intentó tomar el poder por la fuerza e imponer la dictadura el proletariado, con las consecuencias que muchísimos guatemaltecos lamentamos. Un ejemplo de lo que es capaz de hacer la gente de la hoz y el martillo es el bombazo del Parque Central en 1980, bombazo del cual muchos jóvenes no han oído hablar.

Las pintas del 1 de mayo deben darnos que pensar.

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  1. warren orbaugh

    La gran contradicción de estos grupos consiste en que reclaman respeto, no respetando y mostrando su simpatía y veneración por genocidas.

  2. Estoy totalmente de acuerdo. Esta gente sin educación y resentida debería ser conducida a donde corresponda para pagar su vandalismo. En el Estado de California,a estos vandalos los obligan a borrar lo que pintaron y a borrar lo que otras personas como ellos hicieron en autopistas, callejones y paredes. Hagamos lo mismo.

    Sobre la historia, hay que difundirla para que estos ignorantes sepan lo que están haciendo. Alabando un sistema económico fallido que se ha caracterizado por el asesinato de toda persona que no piensa y actúa como ellos quieren.

  3. Ezequiel Pineda

    Ridículos y desprestigiados sindicalistas, pero lo hacen porque no hay autoridad que se los prohíba. Nuestro problema es la impunidad, pueden manifestar y llevar mantas con los símbolos que quieran pero el mínimo delito debe ser castigado, no podemos seguir tan tolerantes ante la delincuencia socialista campante por todo el país.

  4. Siempre he manifestado en ésta página que tengo un pesamiento de izquierda democrática; dejenme comentar que éstos grupos no representan a todas las personas que tenemos ésta posición política, y sería ridículo generalizar por ello, como decir que por ser liberaloides se deben andar con cabezas rapadas, vestirse de ku klux klan y matar gente de color.

    Y ya que estamos en ésto de las cifras, latinoamérica cual ovejita acató el consenso de Washington y el resultado, decenas de millos de latinoamericanos muriendo no en campos de concentración, sino en barrios privados (de agua, luz, educación), inevitablemente la concentración de riqueza en manos de pocos creará grandes contingentes de pobres, y en el caso guatemalteco, sin patrañas de que los “inocentes”, emprendedores lo re-invierten, porque el capital se va mayormente al exterior

  5. […] que la dirigencia sindical organizó el 1 de mayo pasado, algunos participantes en ella ensuciaron la Sexta avenida del Centro Histórico y mutilaron la estatua de Tasso Hadjidodou que se halla en […]

  6. […] fotografía con la estatua de Tasso Hadjidodou. Su actitud contrasta con la de los delincuentes que dañaron ese monumento durante su manifestacion del 1 de […]

  7. […] como salvajes.  Para el Primero de mayo los manifestantes dejaron la Sexta avenida llena de hoces y martillos.  Eso debería darte otra pista.  Las firmas que dejan en sus actos nos dicen bastante acerca de […]

  8. […] mayo sus huestes llenaron de hoces y martillos la Sexta Avenida. Sus efigies del Che Guevara y las banderas rojo y negro adornan las marchas de […]

  9. […]  Tomás Guzaro y  Terri McComb] . No les gusta que se recuerde que llenaron la Sexta Avenida de hoces y martillos, ni que se hable de la dictadura del proletariado, ni de los secuestros [y otros delitos] que […]

  10. […] la manifestación del 1 de mayo de 2012, aquella iconografía ominosa abundó en las paredes pintarrajeadas de la zona 1; así como en la marcha del 20 de octubre de 2013.   […]