Carlos Fajardo, la prosperidad y la benevolencia

Don Carlos Fajardo no cree que el individualismo mejore la calidad de vida de las personas porque no ha podido establecer la relación que hay entre un ambiente propicio para la creación de riqueza, la riqueza, y el bienestar. Y quizás estas evidencias nos ayuden en ese asunto.

Hola don Carlos. Si usted chequea cuáles son los países en los que hay más libertad económica (y en general mejor respeto a los derechos individuales) y luego chequea en qué países hay un mejor índice de desarrollo humano, va a encontrar con que la gente vive mejor en los países donde hay más libertad. La gente goza de mayor bienestar, de más desarrollo y de mejor nivel de vida, en aquellos países donde hay una tradición de respeto a la libertad y a los otros derechos individuales.

Se va a encontrar con que la gente vive mal, o peor, en aquellos países donde la libertad, la vida y la propiedad, así como el derecho a la búsqueda de la felicidad, no son, ni han sido respetados.

No me crea; véalo en: el Indice de Libertad Económica y véalo en el Indice de Desarrollo Humano.

De verdad creo que si aspiramos a ayudar a los pobres, lo mejor que podríamos hacer es fundar un sistema que no los haga depender de la caridad y menos, aún, de los favores políticos. Yo digo que sería mejor fundar un sistema en el que hubiera oportunidades. Oportunidades para tener mejores empleos, mejores salarios y hasta para fundar y multiplicar sus propias empresas. La idea sería crear riqueza, en vez de sólo repartir lo que hay. Honestamente, creo que es mejor ayudar a los pobres con oportunidades, que con limosnas y con caridades. Lo cual no excluye la benevolencia, ¡para nada!, especialmente en casos de emergencias, desastres naturales y otras calamidades. La gente del corredor seco, en Guatemala, por ejemplo, necesita desesperadamente que les echemos una mano.

Usted pone en duda que la gente sea más generosa cuando le sobran más recursos. Y si bien es cierto que la benevolencia no es exclusiva de ningún grupo social, o es cierto que aún en la miseria más desesperante la gente comparte y es generosa con los más necesitados, también es cierto que más tiene la gente, más puede dar. Eso es sólo cuestión de aritmética.

No conozco rico alguno que no tenga por lo menos una obra de benevolencia favorita. Los ricos apoyan fundaciones para combatir enfermedades, para combatir el analfabetismo, el hambre, la mendicidad, el abandono, y muchas otras cosas indeseables.

Por cierto, ¿sabía usted que las mujeres ricas dan más que los hombres ricos? Ricos como Bill Gates y Warren Buffett – además de crear riqueza y hacer nuestras vidas más cómodas– dan millones y millones para todo tipo de causas artísticas, científicas, y de lucha contra la pobreza. Lo mismo hicieron Rockefeller, Mellon, Carnegie, Vanderbilt y otros Y aquí en Guatemala es lo mismo. Busque una obra de benevolencia significativa y en su junta directiva encontrará a los ricos locales.

A nivel de países, los países pobres reciben millones y millones de dólares en ayuda de los ricos en los países ricos. Esa ayuda llega directamente por medio de individuos, fundaciones y clubes de servicio; e indirectamente por medio de la cooperación internacional. Las víctimas de tsunamis en Asia, sequías en Africa, huracanes en Honduras, Guatemala y Nueva Orleans, terremotos en Turquía y en Haití y otros desastres naturales reciben generosas ayudas monetarias, tecnológicas y científicas de parte de los ricos en los países ricos. Y aunque los terremotos sean más fuertes en los países prósperos (y libres) como Chile; hacen menos daño que en países pobres (y no libres) como Haití. Y en muchos países ricos existe una cultura de benevolencia. No me crea a mí; por favor, vea las cifras.

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  1. Carlos Fajardo

    Gracias por su comentario Sr. Figueroa. No estoy de acuerdo al respecto de lo que supuestamente "yo opino del individualismo"; considero que la responsabilidad individual y la busqueda del bienestar individual forman parte la estructura mental de todo ser humano, y que ambos aspectos están enmarcados en la dinámica histórica de cada sociedad. Hay condiciones económicas e históricas que determinan que una gran cantidad de ciudadanos no tengan actualmente acceso a servicios privados o publicos de salud, educación, transporte, vivienda, etc., o sea, son pobres. No es caridad intentar romper ciertos circulos de pobreza por medio de la Transferencias Monetarias Condicionadas, pues dichos programas han dado resultado en muchas partes (Brasil, Mexico, Venezuela). Posiblemente para usted el dicho aquel "Lo mejor que se puede hacer por los pobres es dejarlos en paz" (no recuerdo si fue Friedman o Mises) es lo más acertado, pero con un pensaminto así muchos ciudadanos (hombres, mujeres y niños) morirán este año de hambre. Es cierto que es necesario reformar el sistema para que la mayor cantidad de gente tenga bienestar, el problema es en qué sentido. Usted, creo, piensa que al ser todos algún tipo de superhombre que se puede valer por sí mismo en todos los aspectos no será necesario el Estado en su forma actual y por eso hay que luchar por disminuir su tamaño y la recaudación de impuestos; que al dejar al libre mercado y sus fuerzas actuar de manera "natural", la humanidad necesariamente tiene que dejar atrás el atraso o "la falta de emprendimiento" y mantenerse en constante lucha por la sobrevivencia y así llegará eventualmente a un nivel superior en el aspecto evolutivo y social. Desafortunadamente no pienso lo mismo, ya que lo considero utópico puesto que las sociedades se vuelven más complejas con el tiempo y es necesario estructurarlas de alguna forma. Espero poder extenderme en este tema en otra ocasión.Sobre si los paises con mayor libertad económica tienen más progreso económica, considero que esos paises tuvieron su oportunidad histórica para desarrollarse, proteger su economía cuando fue necesario y abrirla cuando estuvieron en capacidad de competir. Además, mucha de la riqueza de esas naciones fue expoliada a naciones menos poderosas a lo largo del tiempo (India, Africa, América Latina) a través de gobiernos que parecían más representantes de casas comerciales. Usted dirá "así es el libre mercado", pero entonces, ¿el propósito no es enriquecer al país y a su población? Insisto, la teoría del derrame no ha funcionado (por lo menos todavía). Usted está de acuerdo con la exploración minera, yo estaría de acuerdo si hubiera más para el Estado para construir mas Hospitales y contratar más medicos. Esperar a que la riqueza se derrame desde la Montana Inc. no creo que sea factible, en Guatemala por lo menos.Seguimos en contacto.Carlos Fajardo