A ver…ahora que está hot este tema: ¿cuál es el papel de la ciencia y el de los derechos individuales en la política sobre drogas? La guerra contra las drogas, es una guerra perdida? ¿Cuál es el papel de la compasión en la política sobre drogas?
Estas y otras preguntas responderá Ethan Nadelman quien, según la revista Rolling Stone, es el hombre clave en materia de reforma de la política sobre drogas. Nadelman es fundador y director ejecutivo de la Drug Policy Alliance. Si te interesa el tema, ahí nos vemos: Jueves 16 de febrero, 6:30 p.m. Auditorium Juan Bautista Gutiérrez, de la UFM. Entrada: Q100 para el público general, y gratis para estudiantes de La casa de la libertad. La admisión se paga en miu.ufm.edu/webmedia/conferencia/
El tema está caliente porque el fin de semana el presidente Otto Pérez Molina anunció que favorece la despenalización del uso de estupefacientes; y -más veloces que un rayo- en la embajada de los Estados Unidos de América se apresuraron a advertir que la administración de Obama rechaza la idea de despenalizar.
Honestamente creo que es un error de los gringos, porque hay evidencias suficientes de que la guerra contra las drogas está perdida; no cumple con su objetivo, daña los derechos individuales, es como aquello de que sale más caro el caldo que los frijoles, y en fin…es un fracaso. Si tienes dudas te recomiendo ir a la conferencia del jueves y visitar La guerra contra las drogas, de el Cato Institute, o a la Drug Policy Alliance.
Está caliente, también, por el reciente fallecimiento de Whitney Houston que, igual que otros iconos populares como Marilyn Monroe, Jimmy Hendrix, Amy Winehouse, Kurt Cobain, Michael Jackson, Heath Ledger, Andy Gibb, River Phoenix y Elvis Presley, para mencionar sólo unos, han muerto víctimas, no de las drogas, porque las drogas son cosas y las cosas no actúan, sino de sus propias malas decisiones sobre el uso de estupefacientes y de un sistema que estigmatiza y marginaliza a los usuarios de drogas.
Por lo pronto la propuesta de Pérez Molina abre un debate necesario, aunque incomode a los intereses creados alrededor de este tema; y al conservadurismo local.
