10
Ago 10

PDH en defensa de los derechos de los tributarios

Muy atinadamente, y en legítima defensa de los tributarios, el procurador de los Derechos Humanos, Sergio Morales, presentó un recurso de amparo contra la Superintendencia de Administración Tributaria, debido a la amenaza que hiciera de suspender el Número de Identificación Tributaria de aquellas personas que no hubieran pagado el Impuesto de Circulación de Vehículos.

Morales argumenta, y con razón, que la medida es arbitraria y abusiva, debido a que no hay legislación alguna que faculte a la SAT para amenazar a los tributarios con la inhabilitación de su NIT.

Seguramente, a muchos funcionarios parece olvidárseles que a ellos, en sus funciones públicas, sólo les está permitido hacer, aquello que la ley los faculta expresamente para hacer.


La noticia está aquí.


10
Ago 10

Más arbitrariedad, privliegios e impunidad

Allá por finales de la década de los 80, hubo una iniciativa de oficial en el sentido de prohibir el uso de vehículos polarizados, con el argumento de que estos eran usados con propósitos delictivos. La disparatada prohibición se salió de la línea azul cuando pretendió excluir de ella a los vehículos usados por funcionarios. Por un lado, la excepción suponía que los funcionarios no se involucran en actividades delictivas; y por otro, les concedía a ellos el privilegio de protegerse, en sus vehículos contra la delincuencia y contra el sol.

De eso me acordé cuando leí que de los pretendidos efectos de la Ley de Extinción de Dominio, los funcionarios quieren excluirse a sí mismos.
Esa ley, que es parte de la Guerra contra las drogas, es una güizachada que legaliza el comiso y la expropiación sin el debido proceso legal, mediante el truco de apuntar contra las cosas, en vez de hacerlo contra los propietarios.
¡Con razón se espantaron los funcionarios!, y con razón quieren el privilegio de estar protegidos contra semejante legislación. Y claro, los funcionarios pueden protegerse a sí mismos; pero, ¿quién protege a los tributarios y a los electores? Esa ley no debe ser aprobada…¡y menos, con privilegios!

10
Ago 10

La CICIG acusa a Vielmann, Giammattei "et al"

La Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala ha acusado por ejecuciones extrajudiciales a Carlos Vielmann, ex ministro de Gobernación; Alejandro Giammattei, ex director de presidios y aspirante a la Presidencia; Erwin Sperisen, ex director de la Policía y a Javier Figueroa, ex subdirector de Investigación Criminal. Y, en consecuencia, el JuzgadoPrimero de Instancia Penal emitió sendas órdenes de captura. En septiembre de 2006, los acusados, funcionarios todos, protagonizaron la toma de la Granja Penal Pavón, que era controlada por los reclusos.

A mí, todo esto, me da mucho que pensar; y lo primero es que me asalta la duda de si en realidad la CICIG busca acabar con las mafias que están asfixiando a los guatemaltecos y lo poco que está quedando de nuestras instituciones; o si bien, se está perfilando como una especie de policía política que -a la luz de los casos Rosenberg, Rivera y este que comento ahora- está más enfocada en la publicidad y en proteger a la administración de Los Colom, que en otra cosa.
Lo segundo que se me viene a la cabeza es que, aunque yo nunca votaría por Giammattei y se que Vielmann y Sperisen son volados y a Figueroa no lo conozco, mucha gente celebró que los primeros tres llegaran a dirigir la seguridad ciudadana, y recuerdo que mucha gente celebró la toma de Pavón. La gente los tiene por gente buena. Y entonces, luego de esta persecución, ¿qué clase de gente va a aceptar ser funcionario? ¿Cómo se defiende, de la delincuencia desbocada, una sociedad con instituciones débiles, o sin ellas?
Me acordé de la película Las pandillas de Nueva York, y me pregunto si la Historia de esa ciudad sería la misma sin el bombardeo contra las pandillas y si hubo persecución alguna contra quienes lo ordenaron, lo dirigieron y lo ejecutaron. Me acordé de que al mafioso John Dillinger, la Federal Bureau of Investigations lo esperó a la salida de un cine y tres agentes del FBI lo liquidaron en un callejón.
¡Por supuesto que no estoy defendiendo la posibilidad de que quienes detentan el poder puedan ejercer actos de violencia impune contra las personas! y tampoco estoy sosteniendo el indefendible vox populi, vox dei; pero, creo que sí es válido tratar de entender como es que se forjan las sociedades que hoy tenemos como razonablemente pacíficas e institucionalizadas. ¿Por dónde se empieza a sanear una sociedad enferma y violenta? Puse los dos ejemplos anteriores para ilustrar la pregunta, y no como una recomendación.
A mí me gusta decir que estamos escribiendo -ustedes y yo- las páginas de la Historia de Guatemala que serán leídas dentro de 50, 100, o 500 años. ¿Qué verán los que vienen atrás cuando lean la Historia del país que les dejamos? ¿Quiénes serán los héroes y quiénes serán los villanos en los libros de Historia chapina?

10
Ago 10

Examen semestral de Lenguaje, viaje a 1968

Mi madre ha estado escarbando entre papeles viejos y halló este examen de Lenguaje, con fecha 4 de julio de 1968. Saqué 90 porque puse Oja donde debí haber puesto hoja y puse Sapato en vez de zapato; y en la parte de atrás escribí Jifafafa, donde debía haber puesto Jirafa. Pero no se engañe el lector, mis calificaciones no estaban en ese rango normalmente.

Lo que me cayó en gracia es que yo mezclaba la letra de carta y la letra de molde, cosa que años más tarde intentaron corregir mis maestras -con planas de letra script-. Recuerdo una vez que mis padres comentaron mi mala letra con una de mis tías abuelas; y ella también recomendó planas, que yo nunca hacía. También me cae en gracia que recuerdo muy bien cómo era mi clase y dónde estaba sentado en Primer año de primaria. Y recuerdo que mi profesora era la señorita María de la Luz.


10
Ago 10

El reloj se detuvo para Roberto Cantoral

La primera vez que tengo memoria de haber oído Reloj, fue en 1975 cuando fui a Tikal con el colegio. Cada año el Liceo Minerva llevaba a los de Quinto curso a Tikal y, aunque yo estaba en Segundo curso, fui invitado junto con un amigo y compañero de clases. Y bueno, en aquel tiempo la carretera no estaba asfaltada, y tardamos 15 horas en llegar a Poptún bajo una lluvia intensa. Y, ¿qué hacíamos un grupo de adolescentes cuando tienen que pasar 15 horas en un bus? Pues entre otras cosas, cantábamos. Reloj es una de las canciones que me recuerdan aquella excursión inolvidable; y el autor de la misma, Roberto Cantoral, murió el 7 de agosto pasado. Por cierto que volví a hacer ese viaje en 1976 con los de Quinto de ese año, y Reloj volvió a ser parte del cancionero.
La Barca, que es otra de sus canciones más conocidas, la recuerdo del repertorio en las fiestas de mis padres y de mi abuela.